El acceso norte de la vía de alta velocidad a la estación de Vigo no sufrirá demoras administrativas derivadas de los estudios de impacto ambiental. El ministerio ha dado su conformidad a la modificación del proyecto, que consiste en soterrar todo el trazado desde las Torres de Padín en Teis hasta la estación de Urzáiz, que también quedará subterránea. La Dirección General de Calidad Ambiental hará público, en los próximos días, el informe en el que se justifica que no es necesario que el trazado se someta a ese trámite.

La resolución se adopta una vez que los órganos correspondientes de la Xunta de Galicia han constatado que no se producirán impactos significativos por la obra de la construcción subterránea de la vía.

La principal consecuencia de no ser necesario el estudio de impacto se refiere a los plazos de ejecución. En el caso de que se hubiese decretado que sí era preciso ese trámite, el calendario de la obra se habría retrasado al menos un año, que es el tiempo mínimo que suelen emplear los técnicos del ministerio para emitir este tipo de informes. Además habría de realizarse un nuevo proyecto, con lo que el retraso sería aún mayor.

La decisión del Ministerio de Medio Ambiente se produce una vez conocidos todos los informes favorables de la Xunta, así como la alegación presentada por el Concello, que argumentaba que la opción de soterrar las vías favorece la integración urbanística del ferrocarril en la ciudad y mejora las condiciones ambientales, al suprimir los ruidos que producirían los trenes al circular en superficie.

La resolución permite seguir adelante con la redacción del proyecto, en espera de la firma del convenio entre las tres administraciones -Concello, Xunta y Fomento- para la financiación definitiva de todas las actuaciones.

Trazado

El trazado del acceso norte del AVE a Vigo se había concebido inicialmente en dos fases. La primera, desde las Torres de Padín -donde desembocaría el túnel de As Maceiras bajo el monte de A Madroa- hasta la zona de San Lorenzo, en que las vías irían en superficie y semicubiertas con una especie de pórtico hacia la ría. La segunda, desde esa zona hasta la estación, en que discurriría en un túnel. Esta propuesta ya disponía de estudio de impacto ambiental favorable publicado en julio de 2005.

Cambios

La modificación del proyecto consiste en que todo el trazado, desde las Torres de Padín hasta la estación vaya en túnel y a una cota más baja de la prevista en principio para facilitar la posterior conexión con la futura salida sur. Un cambio que ahora recibe el visto bueno de Medio Ambiente, al considerar que no supondrá variaciones significativas de impacto al realizar la obra. De hecho, está previsto que la construcción de las vías bajo tierra no sea visible por los ciudadanos en superficie, ya que las tuneladoras trabajarán a una cota suficientemente baja. El proyecto, además se completará con la nueva estación que construirá Vialia, con un gran mirador a la altura de Vía Norte. Todo el trazado de la vía actual del ferrocarril quedará en superficie como un gran paseo ajardinado de unos tres kilómetros de longitud.