sandra penelas

Primera baja en la lista de los Pritzker vigueses. El rector Gago admite que en la actual situación económica el proyecto de vías elevadas para el campus de Mendes da Rocha no es asumible y retrasa su ejecución de forma indefinida, tal y como avanzaba este periódico el pasado mes de junio.

El vicerrector de Planificación, José Cidrás, reconocía entonces a FARO que la primera fase del diseño, en el entorno de las ingenierías, estorbaba a las infraestructuras de investigación que se están ejecutando en la zona, pero aseguraba que entre las razones de la suspensión no figuraba su excesivo coste.

Alberto Gago, sin embargo, no lo ha negado: "Primero, tenemos unas cuantas iniciativas que no estaban en la programación y son prioritarias; y, segundo, el proyecto de Mendes da Rocha es enormemente ambicioso y debe tener un futuro despejado. Si no lo hay, es mejor no empezarlo. No es éste seguramente el mejor momento para imaginarlo en su totalidad".

La primera fase, que incluía uno de los cinco aparcamientos de estructura espiral previstos y el inicio de la primera pasarela, requería una inversión de doce millones de euros. El presupuesto de este año incluía una partida de 2,5 millones para el comienzo de las obras, pero el coste total del proyecto, en el que también colabora Caixa Galicia, nunca ha sido revelado por la Universidad.

Gago asegura que el diseño de vías elevadas, una de las propuestas "estrella" del mandato de su antecesor Domingo Docampo, permanecerá como "un activo" de la Universidad sin merma alguna. "Es que el proyecto lo tenemos. ¿Nos podremos lanzar a ellas? Si hay un plan de inversiones claro por parte del financiador a lo mejor lo pensamos", aclara sobre sus intenciones.

Por ahora, la pasarela se cae de su nueva propuesta para el área de las ingenierías, la única parte del proyecto que la Universidad llevará a cabo. Gago le ha pedido al arquitecto brasileño que construya un aparcamiento subterráneo en lugar de uno en altura y con una plaza pública en superficie.

"Para nosotros tiene mucha más urgencia esta parte y es la que nos gustaría relanzar. La reordenación debe incluir el módulo tecnológico-industrial, que está a punto de ser concluido, la circulación del tráfico y el problema del aparcamiento, que es muy gordo", desgrana el rector, quien confía en que las obras puedan comenzar en 2009.

Próxima visita

Mendes da Rocha ya trabaja con todas estas peticiones sobre la mesa y Gago asegura que ha sido comprensivo con su decisión. "Él está trabajando en varios países europeos como España, Portugal e Italia y esto no es una novedad para él. Es consciente de las dificultades por las que se está atravesando y de las prioridades que nosotros tenemos", sostiene.

El brasileño podría volver al campus este mes para reunirse con el equipo de gobierno. Será una visita muy diferente a las anteriores presentaciones del proyecto en las que la Universidad cuidó al máximo la difusión y la puesta en escena. La última comparecencia oficial del premio Pritzker en Vigo tuvo lugar en junio de 2007, cuando acudió como invitado a la firma del convenio para la segunda fase entre el rector Gago y el director general de Caixa Galicia, José Luis Méndez.

La oposición denunció _su carácter "faraónico"

El propio rector admite las ambiciosas dimensiones del diseño de Mendes da Rocha para el campus vigués. El arquitecto brasileño ha presentado una serie de pasarelas metálicas en la cota 460, la misma del edificio Miralles, que unirían las facultades y cinco aparcamientos situados en los extremos del campus.

Esas vías elevadas tendrían unas dimensiones de doce metros de ancho y se apoyarían en pilares colocados cada sesenta metros e integrados en el paisaje, según avala el propio autor.

La primera noticia oficial sobre la paralización del proyecto, en el que colabora el arquitecto local Alfonso Penela, se produjo en el Consello de Goberno del pasado junio en respuesta a una pregunta de la oposición, que ha denunciado desde el principio el carácter "faraónico" y el excesivo coste del diseño.

Su portavoz, el profesor José Luis Legido, mantenía entonces que la falta de inversión era la única razón para suspenderlo. La oposición también ha advertido en varias ocasiones sobre los problemas que la adversa meteorología del campus podría causar sobre las pasarelas.