El Concello de Vigo se ha propuesto atajar los retrasos injustificados en la tramitación de expedientes y, con vocación "ejemplarizante", ayer mismo aprobaba en la última junta de gobierno del mes de julio la apertura de diligencias disciplinarias a un agente de la Policía Local por dilatar sin motivo la tramitación de varias multas de tráfico.

Consta en el informe oficial que el agente expedientado hizo entrega de infracciones de circulación de carácter grave con hasta mes y medio de tardanza. El documento recoge que notificó en Jefatura el pasado 2 de julio un total de 14 denuncias que habían sido impuestas entre el 16 de mayo y el 4 de junio, fecha de la más reciente.

El informe redactado por un superior sobre el trabajo del policía apunta que sus retrasos a la hora de gestionar las multas "no impedirán necesariamente la tramitación de las sanciones". No obstante, la Administración local se ha decidido a actuar porque asegura en su resolución que este comportamiento le perjudica "en cuanto impide disponer enteramente del plazo legal establecido para resolver los trámites".

Fuentes próximas al caso señalan que "en alguna ocasión pueden producirse olvidos o descuidos por parte de los agentes, pero nunca tan significativos". No es un hecho único en Jefatura el que se entreguen las sanciones con semanas de retraso, pero sí "el más destacado", por lo que se ha decidido actuar para "lograr una tramitación efectiva de los expedientes"

Por la propia dinámica de trabajo, lo habitual es que los policías entreguen "casi al día" las sanciones que ponen en la ciudad y, pese a que en este caso concreto coincide en medio del retraso una baja laboral, desde el Concello se ha considerado que la tardanza "era excesiva" y se han decidido a actuar.

Analizado el caso con detenimiento, el grupo de gobierno decidió ayer incoar diligencias contra este agente y abrir una investigación para determinar la posible existencia de una infracción disciplinaria, que figurará en el expediente del policía, pero que en ningún caso implicará multa económica.

Pese a lo significativo de la decisión, por ser casi única con el actual equipo, desde el Concello le restan importancia porque lo único que se busca es "que el cuerpo funcione y sea efectivo".