El concejal de Tráfico, Xulio Calviño, admitió ayer que su departamento no cuenta con efectivos suficientes para controlar las licencias de las terrazas durante la temporada estival. El edil socialista anunció que una vez terminado el verano los policía realizarán una campaña de "inspecciones masivas" para supervisar la legalidad de los negocios, pese a que es durante este periodo veraniego cuando más terrazas se instalan en la calle.
La nueva ordenanza, aprobada hace tres meses, de poco ha servido, al menos a la hora de vigilar su cumplimiento y penalizar a los infractores. Desde abril el Concello no sancionó a ningún negocio, pero tampoco pudo supervisar las 235 terrazas autorizadas debido a la escasez de agentes de policía. La llegada de la temporada estival provoca que gran parte de la plantilla se destine a la vigilancia de playas.
"Por ahora tenemos 26 agentes de refuerzo. Seguimos teniendo problemas y necesitamos 100 nuevos policías", admitió el edil de Tráfico. La confianza de Calviño es que su departamento pueda contar con un centenar de agentes más al término del mandato.
Hasta el momento la nueva ordenanza de terrazas -que contempla sanciones entre 600 y 2.000 euros- está teniendo la misma efectividad sancionadora que la antigua normativa. Por ahora -y al igual que el año pasado- el Ayuntamiento no multó a ningún negocio de restauración por carecer de licencia o actuar de forma ilegal.
Demanda
La demanda de solicitud de terrazas cae en picado desde hace tres años. El Concello autorizó 309 hace dos años. En 2007 el número de licencias concedidas se quedó en 256 y en lo que va de año se otorgaron 235.
