El juicio por la muerte de un peatón en la calle Caracas no fue el único que se celebró ayer en Vigo relacionado con accidentes de tráfico. Otro conductor se sentó en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2: la fiscal considera que causó un siniestro bajo los efectos del alcohol ya que dio una tasa superior a 0,30. El acusado dijo que iba en "perfecto estado" y alegó que la medicación que toma para una enfermedad que padece fue la que alteró el resultado de la prueba policial.

Los hechos, por los que se enfrenta a dos años de prisión, ocurrieron la tarde del 17 de marzo de 2007 en Samil. El Audi del acusado alcanzó a una moto que iba tras un Mercedes que se paró ante un paso de peatones.

Los policías dijeron que olía a alcohol y parecía cansado, pero reconocieron que estaba lucido y su comportamiento fue correcto y colaborador. Dos compañeros de trabajo del imputado que estuvieron con él esa tarde aseguraron que no había bebido nada.