Garantizar la potabilidad del agua de las fuentes públicas "es posible" si el Concello pone "todos los medios" para que los ciudadanos pueden consumirla sin riesgo de contaminación. La federación vecinal consideró ayer "inaceptable" que la edil de Medio Ambiente haya derivado la responsabilidad de beber de los manantiales en los ciudadanos al no poder asegurar que es potable. "Las aguas naturales son un recurso muy apreciado y de gran aceptación entre las personas que a diario acuden a rellenar garrafas; un servicio y un patrimonio al que no vamos a renunciar", advierte el colectivo.

La presidenta de la federación, Elena González, reclamó al Concello que vuelva a colocar en las fuentes los carteles que informan de los resultados de los últimos análisis y de la potabilidad. Tras el caso de Lugo, en el que ya resultaron intoxicadas 25 personas tras consumir agua de un surtidor público, la concejala Chus Lago advirtió de que el Ayuntamiento vigués no puede garantizar la salubridad del agua. "Tiene que tomar todas las medidas: multar si hay vertidos, y hacer los controles necesarios", recalca la presidenta vecinal, que critica que los resultados de las analíticas figuren sólo en la página web oficial municipal. "Si no quieren, que nos las entreguen en las sedes de las asociaciones, que nosotros nos encargamos de informar a los vecinos", añadió.

La entidad reclama que se haga un seguimiento de los manantiales desde el origen para vigilar su potabilidad. "Debe hacerse un control mínimo sobre el naciente y el recorrido, cuidando la limpieza, y haciendo análisis de la red de saneamiento y de los factores ambientales", señalan. Como primer paso proponen que se elabore un plan de trabajo, en colaboración con los técnicos del Laboratorio Municipal.

"Abandono"

Los vecinos cargan directamente contra la responsable de Medio Ambiente, a la que acusan de "abandonar las fuentes y delegar toda la responsabilidad en los consumidores". Para la federación, -que ya ha vivido varios enfrentamientos con el alcalde y el ala socialista del gobierno-, ésta "es una muestra más de la ausencia de la concejalía en los problemas de la ciudad". Elena González recomienda a Lago que, "en vez de organizar viajes y rutas, priorice el evitar los vertidos a la Ría o al Lagares y solucionar el olor insportable que causa la depuradora en la parroquia de Coruxo".