Estamos a punto de dejar atrás un edificio de más de 50 años que está agotado". El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, prejubiló ayer el Hospital Xeral al afirmar que dará paso al que será, "seguramente, el mayor de los complejos sanitarios previstos en Europa".
El jefe del Gobierno gallego presidió la presentación del proyecto en el auditorio del Centro Social Caixanova, en un acto al que asistieron la conselleira de Sanidade, María José Rubio; la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino; el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras; y el alcalde Abel Caballero, junto a otras personalidades políticas y responsables de instituciones sociales, económicas y profesionales olívicas. El nuevo hospital se convertirá, en palabras de Touriño, en "la seña de identidad del nuevo Vigo, y plasma el modelo de la Galicia del siglo XXI".
La situación del área sanitaria, deficiente en comparación con las del resto de Galicia, fue una de las cuestiones que abordó Touriño, que no ocultó las diferencias desfavorables para la ciudad. "Ésta es una demanda postergada más allá de lo razonable, que ponía en evidencia una falta de equidad para el área más populosa y peor dotada de Galicia. Un clamoroso desequilibrio territorial que, en un ámbito tan delicado como el sanitario, no estábamos dispuestos a permitir", se extendió. Confía Toruiño en que el proyecto presentado ayer disipe el "escepticismo" de la población sobre la atención sanitaria.
La novedosa arquitectura del hospital, y su potencial para ser una "locomotora económica en la comarca", fueron otro de los aspectos que tocó. "Será un hospital moderno, versátil y eficiente. Un elemento vertebrador del sistema sanitario actual con tecnología punta y una asistencia con calor humano", agregó a continuación.
"Compromiso"
La conselleira de Sanidade, por su parte, señaló en su intervención que la presentación del proyecto supone "el cumplimiento del compromiso con Vigo iniciado en agosto de 2005". Rubio mantuvo que la propuesta es "sólida, realista y bien planificada", y consideró que obedece "a una nueva filosofía asistencial en la que el paciente es el eje de la atención sanitaria".
