Fue delegado episcopal del Apostolado Seglar. Nombrado por el actual Obispo con un título Honorario, con cariño y para distinguir la dedicación y el trabajo de una vida. De hecho, el canon 509 del Derecho Canónico indica que "el Obispo debe conferir las canonjías tan solo a sacerdotes que destacando por su doctrina e integridad de vida, hayan desempeñado meritoriamente su ministerio". Actualmente es copárroco en Santiago de Vigo. Recuerda que estudió para sacerdote en Portugal y trabajó en varios lugares: "Ser canónigo representa una cuestión importante, porque he trabajado mucho", reconoce. Un accidente que sufrió hace escasas fechas le hizo perder movilidad y por eso sus allegados valoran aún más su actividad. Hasta cinco organizaciones de jóvenes y hermandades católicas, así como grupos de apostolado seglar apoyaron con firmas su distinción.