Los datos de los colegios profesionales confirman la desaceleración del sector de la construcción en toda Galicia y de forma algo más suave en la ciudad de Vigo, donde los ingresos por visados de vivienda nueva cayeron un 19,45 por ciento de abril de 2007 a marzo de 2008 con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

La anunciada crisis económica lleva meses afectando a la hostelería y el comercio y ahora empieza a notarse también en el sector del ladrillo. Por primera vez y de forma excepcional, coincidiendo con la inminente aprobación del Plan Xeral de Vigo, la delegación provincial del Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG) hizo balance de su actividad en los últimos doce meses y confirmó una ligera ralentización en la solicitud de permisos para nuevas construcciones.

Los ingresos de los colegios son directamente proporcionales al número de visados de nuevas viviendas y de ahí obtiene el colectivo el descenso del 19,45 por ciento en la actividad del sector, una bajada que puede parecer abultada pero que se entiende en el contexto actual de ralentización económica y, en el caso concreto de Vigo, porque técnicos y promotores estaban a la espera de obtener noticias sobre el PXOM para tomar decisiones.

Otro dato a tener en cuenta y que ayer destacó positivamente el presidente de la delegación viguesa del COAG, Salvador Fraga, es la fortaleza del sector en la ciudad olívica y su contención frente al descalabro sufrido en otras grandes ciudades gallegas, especialmente en Lugo, donde el número de visados se redujo un 68,47 por ciento en el mismo periodo analizado para Vigo.

El caso de Lugo es especialmente preocupante y el más grave de la comunidad, pero llaman igualmente la atención las reducciones del 47,84 por ciento registrada en Ourense; el 37,79 de Ferrol o el 33,42 de Pontevedra.

Por debajo de la media gallega, estimada en un 33,42 por ciento, tan sólo acompañaban a Vigo las ciudades de A Coruña, con una bajada del 28,97 por ciento, y Santiago, con el 28,21, todas ellas en posición más ventajosa que la apuntada por la media nacional, rondando el 37 por ciento.

Los arquitectos advierten que la Gerencia de Urbanismo carece de medios para gestionar el PXOM con garantías

El Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG) advirtió ayer al Concello de Vigo de la necesidad de reforzar el personal y la estructura de la Gerencia de Urbanismo si pretende gestionar y desarrollar el Plan Xeral con garantías. El presidente de la delegación viguesa del órgano, Salvador Fraga, lamentó públicamente "la carencia de recursos y la inadecuación de sus estructuras para afrontar los problemas reales que se presentan en materia urbanística", al tiempo que recordó lo "frustrante" que hasta ahora está resultando su actividad para los profesionales técnicos, debido a las esperas a la hora de tramitar documentos.

Por todos estos motivos, el portavoz de los arquitectos vigueses urgió al Concello que intervenga y advirtió a sus responsables de que "en caso de que la corporación no ponga medios profundos para instituir una gerencia nueva, entonces nos daremos cuenta de que el problema no es del propio plan, sino de gestión" y, en ese caso, atribuible a los responsables políticos y no a las posibles lagunas del texto.

Informe medioambiental

Así de rotundo se mostró Salvador Fraga en la primera comparecencia organizada por el COAG para valorar el informe favorable de Medio Ambiente al planeamiento de Vigo, emitido el pasado viernes. A pesar de las notables restricciones que impone la consellería al desarrollo de nuevas urbanizaciones y la ejecución de los grandes proyectos pendientes, Fraga lo defendió como "un buen plan que clasifica el suelo por lo que es y no por criterios de mercado".

"No existen contradicciones sustanciales entre ambos textos y la mayoría de los condicionantes que impone Medio Ambiente ya formaban parte de la filosofía del Plan desde el principio", como la integración de los espacios abiertos, la mejora del tratamiento de residuos o la rebaja de los índices de contaminación acústica y ambiental.

Con estas palabras, el portavoz de los arquitectos locales salía en defensa del planeamiento de Vigo y restaba importancia a los condicionantes que ahora deberán manejar los promotores de 40 proyectos catalogados como "estratégicos".

Lejos de criticar el más que probable retraso de las actuaciones, Fraga se mostró bastante conforme con la resolución del departamento de Manuel Vázquez e incluso apuntó que "los nuevos requisitos darán mayor seguridad jurídica a las actuaciones". Eso sí, imposible negar la dilación de los trámites y la reprimenda de Medio Ambiente a las previsiones de crecimiento del PXOM. La consellería habla de unos índices "sobredimensionados", mientras que el presidente de la delegación del COAG tranquiliza a la Xunta porque "será el crecimiento el que obligue a gestionar más o menos suelo, en función de las necesidades".