A.Pereira /B. Márquez /VIGO /Pontevedra
El Centro de Inserción Social (CIS) "Carmen Avendaño" de Vigo, situado en la avenida de Madrid, será uno de los pioneros de España en poner en marcha un Programa de acompañamiento laboral que tiene como objetivo la inserción laboral de presos, tanto privados de libertad como condicionales. El propósito es facilitar la entrada en el mercado laboral de este tipo de personas que suelen tener grandes dificultades para encontrar trabajo después de salir de la cárcel.
Según confirmó ayer el mismo director del centro penitenciario, José Antonio Gómez Novoa, formarán parte de este programa 120 internos tanto del penal de A Lama como del CIS que tiene a reclusos que están cumpliendo penas de tercer grado.
El tiempo de duración de este plan laboral es de 24 meses y todas aquellas empresas que decidan colaborar con la inserción de estos internos, adquieren el compromiso de acompañar y de formar al interno durante este período.
Además, una vez finalizada esta formación, el programa pretende que al menos el 60% de los reclusos que participaron en él acaben incorporados al mundo laboral con un compromiso de contratación.
La Dirección General de Instituciones Penitenciarias está ultimando este proyecto que se prevé entre en funcionamiento a lo largo de este año, por lo que todavía está pendiente su publicación en el Boletín Oficial de Estado. Hasta el momento han sido elegidos diez penales de la península. Además del CIS de Vigo, también serán cárceles pilotos en este programa las de Cadiz, Córdoba, Huelva, Málaga, Sevilla, Madrid, Villabona (Asturias) y Valencia.
En realidad, el plan se le ha concedido a la prisión de A Lama, pero estará coordinado desde el CIS de Vigo, ya que en él se encuentra la mayor población reclusa en tercer grado penitenciario dependiente de la prisión de A Lama.
Reforma del CIS
El Centro de inserción Social de Vigo, situado en la avenida de Madrid, fue reformado e inaugurado el pasado verano, sustituyendo, de este modo, a la antigua prisión de Vigo. La mejora de sus instalaciones se hizo para acoger a 132 presos en tercer grado o arrestos de fin de semana.
