La sorpresa saltó ayer en la reunión de los portavoces municipales para debatir sobre la propuesta del Ministerio de Fomento para la salida sur del AVE. Los tres grupos presentes -Manuel Soto no acudió y alegó que no había sido convocado- se pusieron de acuerdo en demandar al departamento de Magdalena Álvarez que la vía discurra por un túnel bajo la avenida de Madrid, en lugar de hacerlo a través de un viaducto por el medio de la parroquia de Sárdoma.
La decisión, adoptada por unanimidad, se produjo a instancias de una propuesta del BNG, y fue respaldada tanto por populares como por socialistas. Se da la paradoja de que, inicialmente, el equipo de gobierno vigués había apostado por la alternativa del viaducto, elegida por el ministerio, y que los socialistas, tanto la Xunta como el candidato a la alcaldía, Abel Caballero, también habían avalado.
La propuesta se hará firme mañana, en la reunión del consejo de la Gerencia de Urbanismo, en la que se aprobará el texto definitivo de la alegación que el Concello enviará a Fomento, sobre el trazado de la salida sur del AVE entre Vigo y Porriño. Además, en la alegación se hará constar la exigencia al ministerio de que proyecte la conexión ferroviaria con la factoría de Citroën y con el puerto en Bouzas.
La alternativa presentada por el ministerio parte de la nueva estación de Urzáiz y discurre bajo la calle Vázquez Varela por un túnel de 1,2 kilómetros, que desembocaría en la zona de Sárdoma. Posteriormente discurre en superficie mediante el uso de tres viaductos -el gobierno local había defendido inicialmente unificarlos en uno solo de 1,8 kilómetros para no "cortar en dos" a la parroquia- hasta enlazar con el túnel de seis kilómetros por debajo de Puxeiros y llegar a la nueva estación de Porriño.
Con la alternativa segunda al trazado -rechazada por Fomento y apoyada ahora por tres de los cuatro grupos municipales- se mantiene todo el recorrido, a excepción del paso por Sárdoma, que se sustituye por un túnel bajo la avenida de Madrid. Este trazado, admitido ahora por el Concello, coincide con las preferencias de los colectivos vecinales de Sárdoma, que lo consideran más idóneo. Con este planeamiento, el AVE discurriría bajo tierra desde la estación de Urzáiz hasta sobrepasar el alto de Puxeiros. Más de diez kilómetros de túnel.
Argumentos
El nacionalista Henrique Viéitez, que defendió la propuesta, justificó su postura en varios puntos fundamentales. "La alternativa en superficie que plantea Fomento no reserva terrenos para la estación de Sárdoma ni incluye la conexión a Bouzas, que eran los motivos por los que se debía defender esa posibilidad. Al no existir, no se puede penalizar a Vigo ni a Sárdoma con un trazado que rompe la estructura urbana", subrayó el edil del BNG, que insistió: "El túnel supone un incremento del coste en 58 millones de euros, una cantidad por la que no se puede hipotecar a Vigo. Además, los técnicos nos dicen que se puede hacer igual la conexión a Citroën y Bouzas con esta solución".
El socialista Mauricio Ruiz defendió también el planteamiento, pese a que esté en contra de lo expresado por la Xunta y por Caballero: "Hemos conseguido unanimidad sobre esta alternativa, y la conexión con Bouzas se puede hacer igual".
Por su parte, José Manuel Figueroa se limitó a señalar que "es la alternativa que menos afecta al territorio vigués".
