Más de cuatro mil unidades en toda la ciudad

El número de ciclomotores que tiene permiso municipal para circular por Vigo -es decir, que llevan la placa amarilla obligatoria- aumentó considerablemente en lo que va de año.

Si en el mes de enero había 3.325 matriculaciones, el número, a finales de agosto, ascendía ya a 4.450. Estas cantidades suponen que, en los ocho primeros meses del año, el parque móvil de este tipo de vehículos de dos ruedas creció en un 30 por ciento.

El porcentaje de crecimiento es el más elevado de cuantos se registran en el padrón municipal de vehículos hasta la fecha.

El aumento de matriculaciones fue mayor en los meses anteriores a los de verano, lo que pone de manifiesto que estos vehículos son más demandados para recorridos cortos urbanos cuando se acerca el buen tiempo.

Por norma general, la mayoría de los usuarios de ciclomotores son jóvenes de hasta 25 años que los usan para desplazamientos relacionados con el ocio y para recorridos en el casco urbano.

No obstante, se está observando la tendencia de que hay ciudadanos de mayor edad que apuestan por este medio desplazamiento para huir de las retenciones de tráfico que hay en el centro y, sobre todo, por la facilidad para encontrar un lugar de aparcamiento.

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