El Concello y Aqualia ya tienen constancia de cuál sería el precio para solucionar los problemas de funcionamiento de la depuradora del Lagares: 25,5 millones de euros. Ese es el presupuesto, sin IVA, que consta en el informe técnico encargado por la empresa que gestiona la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Vigo. Cerrar los depósitos utilizados como decantadores, construir una pantalla verde, dotar a la planta de equipos de reserva, mejorar el sistema de separación de arenas y desviar de la red principal las aguas pluviales que ahora se mezclan con las residuales son parte de las veintiuna actuaciones que aparecen en el documento. El objetivo es anular "los 24 puntos localizados como generadores de olores".
El informe, entregado esta semana al gobierno municipal, es más ambicioso todavía, y recoge el estudio de Aguas de Galicia en el que se recomienda, entre otras medidas, la construcción de una segunda depuradora en el relleno de Bouzas. La "solución definitiva" para depurar las aguas residuales de una población de 500.000 habitantes -estimación para Vigo en el año 2033- supondría una inversión de 190 millones de euros.
Pero lo urgente es arreglar las deficiencias de una instalación que, desde su inauguración en septiembre de 1997, ha deteriorado enormemente la calidad de vida de los residentes en la zona debido a la emisión de ácido sulfhídrico, amoniaco, mercaptanos y metano, produciendo olores pestilentes. Como se recoge en el informe técnico de Aqualia, "el problema" de la planta del Lagares "es estar ubicada en una zona urbana".
La proximidad a las viviendas, no es, sin embargo, el único inconveniente de una instalación que recibe un 40 por ciento más de caudal que el previsto en el proyecto inicial. Se diseñó para recibir 120.000 metros cúbicos de agua por hora y el año pasado alcanzó los 168.000. A estos límites de capacidad de tratamiento, que obligan a verter a la ría agua sin depurar, se añaden inconvenientes como la excesiva presencia de arena que dificulta y retrasa el proceso de tratamiento.
El presupuesto de las obras se desglosa en cuatro partes: 2,1 millones de euros para acometer la ampliación y mejora de la separación de arenas, desarenadores, instalación de hidrociclones, espesamiento y aireación; 6,6 millones para el cerramiento de las estructuras; 14,9 millones para la desodorización; y 1,8 millones para mejoras como la pantalla verde, equipos de reserva, desvío de pluviales o conducción de livixiados.
Olores
Como pudieron comprobar la semana pasada los técnicos que asesoran a los vecinos afectados, durante la visita de inspección a las instalaciones en compañía de los responsables de Aqualia, la EDAR del Lagares tiene, entre otras deficiencias, dos desarenadores insuficientes para soportar el caudal actual. De ahí que el informe técnico proponga disponer de "una capacidad de desarenadores del doble de la instalada".
A la eliminación de los olores está dedicado un capítulo de este informe técnico. En él se recuerda que la Xunta de Galicia, tras las protestas vecinales, acometió "una serie de mejoras tendentes a desodorizar parte de los gases producidos". Entre ellas, destaca "la cubrición del silo de fangos mediante una estructura de cerramiento".
Estos trabajos incluyeron la construcción de varios biofiltros que han resultado ineficaces, según las estimaciones de los técnicos asesores de los vecinos. La bióloga catalana Nuria Vidal, con experiencia internacional en el tratamiento de aguas residuales, comentaba en su última visita a la planta del Lagares que la corteza de pino utilizada para estos filtros tenía poca capacidad de absorción, y que resultaba más idóneo cubrirlos con cáscara de coco.
El informe técnico que ahora maneja el grupo de gobierno señala que para evitar la propagación de olores generados en la planta "se ha considerado la necesidad de cubrir todos los elementos que tienen agua".
Los desarenadores desengrasadores irán recubiertos de una estructura de hormigón, con una cubierta de chapa galvanizada. Para los decantadores primarios se propone instalar cubiertas abovedadas de aluminio. Los reactores biológicos, con paneles de aluminio apoyados sobre vigas de hormigón. Y los decantadores secundarios, con cubiertas circulares de aluminio.
Además, los técnicos sugieren que en el interior de cada recinto se instale "un conjunto de detección de gases. Mediante sensores de sulfuro de hidrógeno y monóxido de carbono, distribuidos en el interior de cada recinto, se pretende controlar la concentración de estos gases en el aire. Los técnicos sostienen que este sistema logra unos rendimientos de eliminación de olores "muy altos".
En las obras de mejora se añade crear una pantalla verde en el perímetro de la parcela que ocupa la depuradora, utilizando especies de gran porte (cipreses comunes, arces, chopos y magnolios de hoja perenne).
Construir un pozo de gruesos para el colector de margen de ría, una conducción de livixiados hacia la red de drenaje y una toma exterior para la descarga de camiones, sustituir las cubiertas de los espesadores, instalar cubiertas practicables en los digestores, mejorar los sistemas de medición de caudales, renovar las tuberías de los decantadores secundarios, disponer de equipos de reserva y desviar los pluviales son otras de las propuestas para la EDAR del Lagares.
