Como experta en el tratamiento de aguas residuales ha colaborado en proyectos internacionales. La bióloga catalana Nuria Vidal volvió ayer a Vigo para analizar, con los vecinos de Coruxo, la situación de la depuradora del Lagares. Coincide con los técnicos contratados por el Concello en señalar que en unos meses se pueden resolver los problemas de olores y que la solución pasa por recubrir toda la estructura para evitar la fuga de gases. También comparte con el gobierno local la idea de que la ciudad necesita con urgencia otra depuradora.

- ¿Qué deficiencias ha observado en la planta del Lagares?

- En primer lugar, el emplazamiento ya es un problema porque nunca se debe hacer una instalación de este tipo tan próxima a las viviendas. El tratamiento de fangos no funciona suficientemente bien. Según los últimos análisis, parece que hay muchos sulfhídricos y otros derivados del azufre que aún son más olorosos y deberían ser tratados con algún aditivo químico que los hiciese desaparecer.

- Estos gases, ¿suponen algún peligro para las personas?

- El sulfhídrico está a unas dosis altas que no deberían darse y no cumplen los reglamentos de emisiones a la atmósfera. Es peligroso para la salud, no tanto un peligro inmediato de enfermedad sino una molestia que no te permite dormir o comer a gusto. Esto no se puede permitir.

- Los afectados reclaman análisis epidemiológicos.

- Creo que no son necesarios.

- ¿Y analizar los cultivos?

- Tampoco, porque el sulfhídrico, en todo caso, mata las plantas. Creo que debe haber también mercaptanos, que son los que huelen terriblemente.

- Desde el Concello se reconocen fallos estructurales y de mantenimiento en la planta.

- En un principio, había mucha dejadez de mantenimiento. La primera parte de la planta, el pretratamiento, no debería tener olores si hubiese un mantenimiento mínimo. Tampoco debería haber olores en los decantadores primarios. Si los emiten es por que allí se queda suciedad. La parte de las calderas y del tratamiento de fangos es la más delicada y, precisamente, es la que está más próxima a las viviendas. Es la parte más compleja a tratar.

- ¿Hay soluciones?

- Sí hay soluciones, pero debe invertirse en mejorar la planta. La solución definitiva sería construir otra depuradora que tratara la mitad de las aguas porque ésta no tiene capacidad para todo Vigo.

- La propuesta es levantar una barrera vegetal y recubrir toda la instalación.

- La barrera vegetal tiene que ser muy compacta, un biofiltro de tela absorbente de olores. Pero no creo mucho en este método porque los olores se van hacia arriba. Para evitarlos hay que recubrir toda la planta y que en la recogida de gases se pasen por un filtro. Y en verano que no tengan los fangos retenidos mucho tiempo. Si invierten lo necesario y tienen capacidad para cerrar todas las fugas y pasar los gases por filtros se pueden arreglar las cosas en unos meses.