Madonna ha sido demandada por una de las vecinas de su exclusivo bloque de pisos en el corazón de Manhattan. La mujer, de nombre Karen George, asegura estar harta de que la cantante y sus invitados sean demasiado ruidosos y la culpa de haber convertido su hogar en un local de ensayo.

En la demanda presentada por Karen George ante el Tribunal Supremo de Manhattan se puede leer: "Madonna y uno o más de sus invitados bailan con la música a un volumen no razonable y muy amplificada, causando ruidos y vibraciones a través de los muros, los techos y los radiadores".

Karen George, que vive en el piso de encima del de la Reina del Pop, también ha demandado a la comunidad de vecinos pues, según ella, no han tomado medidas contra ésta. Sin embargo, parecer ser que la junta sí había advertido a la cantante de que si no ponía fin a sus ruidosas sesiones de baile sería obligada a abandonar el domicilio.

Por el momento, ni Madonna ni sus representantes han querido hacer ninguna declaración al respecto, informa Contact Music.