Rice, que ha ejercido el cargo de secretaria de Estado desde noviembre de 2004 en el Gobierno del republicano George W. Bush, no quiso revelar si en las elecciones de noviembre pasado, votó por Obama, quien será el primer presidente negro del país.

"Se que tenéis muchas ganas de saberlo", dijo Rice, pero recordó que todavía es secretaria de Estado y que como ha dicho en ocasiones anteriores ambos candidatos, el senador republicano John McCain y el demócrata Barack Obama, "lo hicieron bien e hicieron sentirse orgullosos a los estadounidenses".

Rice recordó cuales fueron los mejores y peores de su gestión como secretaria de Estado, cargo que dejará el próximo 20 de enero cuando la nueva administración tome posesión oficial.

Antes de reemplazar a Colin Powell en la Secretaría de Estado, Condoleezza Rice fue directora de Seguridad Nacional desde el 2000 al 2004.

"Buenos ha habido muchos", dijo Rice al referirse a los momentos más positivos, entre los que citó el "ver a los afganos liberados de los taliban, ver a los iraquíes votar por primera vez", o la visita que realizó a Libia en septiembre de este año para reunirse "cara a cara" con el mandatario libio Muamar el Gadafi.

Esa reunión marcó el comienzo de una nueva etapa en las relaciones entre estados Unidos y Libia, ya que la visita de Rice fue la primera que efectuaba una autoridad estadounidense de su rango al país magrebí en 55 años.

"Ahora podemos hablar de las relaciones entre Libia y Estados Unidos, algo que creo que es bueno para la región y para la gente del país", aseguró.

Entre los momentos más duros citó las negociaciones del cese el fuego de la guerra entre el Líbano e Israel en agosto de 2006, que dio por cerrada la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

En una parte más distendida de la entrevista, Rice, que tiene fama de ser una persona trabajadora y muy disciplinada, aseguró que también tiene tiempo para el ocio.

"Me preocupan también otras cosas que no son el trabajo, los amigos, la familia y tener cuidado de uno mismo", dijo.

Entre sus aficiones más conocidas está la de tocar el piano, pero aseguró que también disfruta viendo un partido de fútbol.

"Nunca he sido tan disciplinada como para no tener diversión en la vida", bromeó.