El pasado 19 de mayo, la intérprete de 'Los Cuatro Fantásticos' se casó con su novio Cash Warren y menos de dos meses después, el 7 de junio dio a luz a su única hija, Honor Marie Warren. Vista con perspectiva la vorágine de esos meses, Jessica Alba confiesa que no todo fue positivo y que no se sentía especialmente guapa durante el embarazo, aunque seguía figurando en las listas de las más deseadas. Nunca me sentí menos sexy", reconoce, según informaciones de los medios estadounidenses recogidas por otr/press, añadiendo que sólo pensaba en "deshacerse de todo el peso" ganado en esos nueve meses. Lo cierto es que los medios de comunicación han recogido las últimas salidas de la actriz con Warren precisamente para destacar que, tras el parto, Alba ha logrado recuperar sin problemas la figura.

Sin embargo, aclara que no se arrepiente en absoluto de haber sido madre, ya que nunca pensó en que iba a encontrar al hombre perfecto, casarse y tener su primer retoño antes de los 30. "Siempre solía conocer a los hombres equivocados", admite. De esta forma, critica a los hombres con los que "si no tienes sexo en los primeros días, te conviertes en una frígida o en una lesbiana", un ejemplo de la postura siempre mantenida por Alba, que defiende una visión clásica de las relaciones. En cambio, con su actual marido, la actriz no forma una "típica pareja de Hollywood". "Me encanta que no sea actor", agregó.

MEJOR DE RUBIA

Alba es una habitual de las listas de las mujeres más atractivas del planeta, pero ahora no se siente tan observada por el sexo opuesto como cuando tenía otra apariencia. "Cuando me volví rubia para Sin City hace tres años, nunca antes había atraído tanta atención de los hombres".

"Fui a un bar y todos los príncipes árabes y hombres mayores se peleaban por pagarme un trago", agregó, "y estoy hablando de hombres de ochenta años".