En el número de mayo de "Blender", que aún no ha salido a la venta pero a la que han aludido ya varias publicaciones especializadas, la cantante neoyorquina habla de sus inicios en el mundo de la música.

En un momento de la entrevista, Keys asegura que el "gangsta rap no existe", sino que "fue una estratagema para convencer a los negros de que se mataran entre sí".

Ese estilo musical nació hacia finales de la década de los ochenta del siglo XX en Estados Unidos y suele hablar de historias de gángsters, drogas, el uso de las armas y el enfrentamiento con la policía.

Ante el revuelo creado por su comentario, Keys emitió hoy un comunicado en su página web en el que considera que se tergiversaron sus palabras y que en ningún momento trató de sugerir que el Gobierno estadounidense hubiera intervenido en la creación de ese género musical.

"Lo que trataba de explicar es que ese término (gangsta rap) está sobre-explotado por algunos medios, lo que provoca reacciones que no siempre son positivas", apunta la cantante de 27 años.

Añade además que "muchas de las letras del 'gangsta rap' hablan de los problemas y las experiencias de los artistas y creo que todos nosotros, incluidos nuestros líderes, podríamos hacer algo más para afrontar esos problemas, incluidos las drogas, la violencia con armas y el crimen".

"Todo el que me conoce sabe que no soy racista", añade Keys, hija de jamaicano e italo-irlandesa, que saltó a la fama con su sencillo "Fallin" y a la que algunos medios han bautizado ya como "la nueva reina del soul".