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La vacuna antirrábica, en disputa

La Xunta mantendrá la voluntariedad de la vacuna de la rabia para los dueños de mascotas en Galicia, la única comunidad junto a Cataluña que no la aplica de forma obligatoria para los perros. La Consellería do Medio Rural alega la ausencia de casos «en más de 60 años». Mientras, el Consello Galego de Veterinarios urge implantarla en perros, gatos y hurones y no fiarse de la «inmunidad de rebaño».

Un veterinario pone una vacuna a un perro

Un veterinario pone una vacuna a un perro / FDV

Elena Ocampo

Elena Ocampo

Vigo

La cifra de canes registrados oficialmente en Galicia asciende a 740.469, mientras que los gatos son 80.977, según datos obtenidos del Rexistro Galego de Animais de Compañía, de la Consellería de Medio Ambiente (Regiac). Por ello, el Consello Galego de Colexios Veterinarios reitera la importancia de imponer la obligatoriedad de la vacunación contra la rabia en mascotas. Tras una reunión mantenida por representantes del Consello con la Xunta a finales del año pasado, se presentó por registro una petición para declarar obligatoria esta vacuna, basada en criterios de salud pública, de prevención epidemiológica y las directrices que establece la normativa europea.

La declaración de la vacuna de la rabia como obligatoria es una competencia transferida a las comunidades, siendo actualmente Galicia y Cataluña las únicas comunidades autónomas de España donde la vacunación antirrábica no es obligatoria, aunque el Consell de Collegis Veterinaris de Catalunya indica que ya hay un proyecto de decreto en trámite de información pública para declararla allí también como obligatoria.

La Xunta argumenta que, dado el «silencio epizootiológico» registrado en la región durante más de 60 años y la ausencia de fronteras con territorios endémicos de rabia, no considera necesario imponer la vacunación obligatoria para perros y gatos. Además, la Consellería do Medio Rural señala que la comunidad dispone de controles oficiales rigurosos para animales procedentes de terceros países y de protocolos de actuación ante situaciones de riesgo, «incluido un plan de contingencia que permitiría una vacunación de urgencia en caso de detectarse algún caso».

Desde el Consello Galego, según su secretario, Luis Núñez, discrepan y alertan de que, al tratarse de una vacunación voluntaria, no hay ningún registro fiable del número de vacunaciones realizadas. Apuntan que únicamente, de forma indirecta, en base al número de vacunas comercializadas por los laboratorios en Galicia, se podría establecer un número de animales vacunados, pero ese sería un valor carente del rigor mínimo que el control de esta enfermedad requiere.

En base a esos datos obtenidos de forma indirecta, se estima que en Galicia el porcentaje de animales vacunados apenas alcanza el 9%, frente a coberturas del 70% en comunidades donde sí es obligatoria. Los veterinarios advierten que esta baja inmunización no solo afecta a Galicia, sino que puede comprometer la inmunidad de grupo en el conjunto del Estado.

Vacunación Rabia Perros y Gatos 2025

Vacunación Rabia Perros y Gatos 2025 / Simón Espinosa

El escrito remitido a la Xunta recuerda que la rabia es una zoonosis vírica de declaración obligatoria a nivel mundial, europeo y nacional, y que la transmisión del virus se produce, fundamentalmente, mediante la mordedura de un animal enfermo o cuando su saliva entra en contacto íntimo con heridas frescas y abiertas de personas o de otros animales.

El Consello también advierte del intenso tráfico de personas y animales que continuamente se mueven por nuestro país y por todo el territorio europeo, con la salvedad de que, siempre que el movimiento sea de menos de seis mascotas (perros), de forma simultánea, no hay ningún tipo de control sobre el desplazamiento de dichos animales.

En su argumentación recalcan la proximidad geográfica de España con países endémicos de rabia (Norte de África), lo que hace que no se pueda descartar la aparición de esta enfermedad en nuestro territorio. Se remiten a casos importados de rabia en países europeos, en los que la enfermedad ha aparecido como consecuencia de la entrada ilegal de animales en periodo de incubación, recordando los casos de camiones con cachorros cuya documentación estaba falsificada o no cumplía la normativa de vacunación, lo que evidencia la vulnerabilidad de la comunidad ante una posible introducción del virus.

En Galicia hay actualmente registrados unos 840.000 animales de compañía y, según el Instituto Galego de Estatística, hay 1,75 millones de viviendas y una población de 2,7 millones de habitantes, lo que da una media de una mascota cada dos viviendas y cada 3,2 habitantes. El Consello entiende que establecer la vacunación obligatoria sería la manera más eficaz de proteger tanto a las personas (propietarias o no de mascotas) como a los animales, además de reforzar la tenencia responsable y la vigilancia sanitaria.

España se mantiene libre de rabia terrestre desde 1978 en todo su territorio peninsular e insular, con la excepción de un caso importado de Marruecos detectado en Toledo en 2013. No obstante, en los últimos años se han registrado episodios recurrentes en Ceuta y Melilla. En esta última ciudad autónoma, según los datos oficiales, se confirmaron nueve casos en perros en 2022, dos en 2023, tres contagios en perros y uno en gatos en 2024, y en 2025 ya van cinco casos declarados.

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