La estancia en el hospital cae por debajo de 7 días al subir las cirugías sin ingreso
Las intervenciones que no precisan hospitalización del paciente crecen un 50% en una década
Y suponen ya casi la mitad de todas las operaciones que se realizan en Galicia

Una operación en el Chuvi. / Ricardo Grobas
Los gallegos pasan cada vez menos tiempo en el hospital. Los avances médicos están permitiendo realizar operaciones cada vez menos invasivas, que reducen al mínimo el tiempo de recuperación del paciente. De hecho, el número de cirugías ambulatorias, que no precisan ingreso pues se le da el alta al paciente en el mismo día, se ha disparado en los últimos años y ya son la mitad de todas las operaciones quirúrgicas que se realizan en los hospitales de Galicia: un total de 107.400, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad correspondientes al año 2023. El crecimiento ha sido espectacular: en solo diez años se han incrementado casi un 50 por ciento. Esto ha permitido ir rebajando la estancia media hospitalaria a pesar del elevado envejecimiento de la población y por primera vez se sitúa por debajo de los siete días, concretamente 6,94 jornadas.
Así consta en las estadísticas del Ministerio de Sanidad que incluye tanto los hospitales públicos como privados. Si se analizan por separado las diferencias son notables. En la red de centros dependientes del Sergas la estancia media es de 7,85 días, la más baja desde que hay registros, pero aún así muy superior a los 3,32 días de la sanidad privada, donde suelen tratarse procesos de menor complejidad.
El envejecimiento de la población gallega provoca un aumento de enfermedades crónicas y de enfermos con pluripatologías, lo que genera cada vez más ingresos hospitalarios. En 2023 fueron 330.454, casi quince mil más que diez años antes.
A pesar de ello, los días de hospitalización media son ahora un 12 por ciento inferiores a las casi ocho jornadas que se pasaban en el hospital los pacientes hace una década.
De hecho, los gallegos permanecen ingresados menos días que la media nacional que se sitúa en 7,12 días. Pese a su población envejecida, es la octava comunidad con la estancia media más reducida.
Este descenso de los días de hospitalización justifica que el número de camas en funcionamiento en Galicia se esté reduciendo. Desde 2013 la comunidad perdió 642 plazas —366 en hospitales públicos y 276 en la privada—. Según los datos del Ministerio de Sanidad, la comunidad cuenta con 8.617 camas en total.
Y no suelen estar todas ocupadas. Aunque varía mucho según la época del año y puede haber momentos puntuales —como en la época de infecciones respiratorias y gripe— en que estén al cien por cien, de media el 27 por ciento de estas camas están vacantes.
Pasar menos días en el hospital es posible gracias a los avances quirúrgicos. A modo de ejemplo, hace solo una semanas el Hospital Álvaro Cunqueiro extrajo un tumor del corazón a una paciente sin necesidad de abrir el pecho.
Este tipo de operaciones menos invasivas permiten en algunos casos que el paciente se vaya a casa sin necesidad de pasar una sola noche en el hospital. Si hace una década solo un tercio de las intervenciones quirúrgicas eran ambulatorias, ahora son ya el 44,3 por ciento de todas las que se practican en los hospitales gallegos. En 2023 se superaron por primera vez las 100.000 intervenciones sin ingreso.
Y en cuanto a la financiación, el gasto medio público en atención hospitalaria se situó en 1.217 euros por habitante. Esta inversión es en Galicia 133 euros mayor que la media nacional, según las estadísticas del Ministerio de Sanidad.
Galicia suma en un año 261 nuevos médicos en centros hospitalarios
A pesar de que ante la creciente demanda sanitaria todos los médicos parecen pocos, la plantilla de facultativos especialistas que trabajan en los hospitales gallegos tanto públicos como privados ha crecido en 2023 pasando de 5.747 doctores a 5.990, según las cifras del Ministerio de Sanidad. Esto supone 243 nuevas incorporaciones.
Pero el incremento no ha sido en todas las especialidades. Baja, por ejemplo, el número de neurólogos (siete menos en un año), especialistas en medicina física y rehabilitación (de 97 se pasa a 96), también hay un oncólogo menos (124) y siete doctores menos en medicina intensiva (144).
Por el contrario, hay especialidades donde se refuerzan de forma importante las plantillas como la de anestesistas que pasa de 478 a 503, la de traumatólogos con 20 nuevos médicos (309 en total) y además el número de ginecólogos y obstetras sube también a 301 (22 más).
En especialidades como psiquiatría, donde la demanda va en aumento por el incremento de enfermedades mentales, se pasa de 249 médicos a 254 en un año, según las cifras de Sanidad.
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