La diputada del BNG, Alexandra Fernández, denunció ayer la eliminación de la atención presencial en el Instituto Galego da Vivenda e o Solo (IGVS) para tramitar el depósito de las fianzas de alquiler, aspecto obligatorio por ley.
Fernández pidió a la Xunta que mantenga el servicio presencial, que el año pasado tramitó 35.000 solicitudes, y advirtió de que su supresión profundiza aún más la brecha digital.
“Muchos de los arrendatarios son personas mayores que tienen dificultades para realizar los trámites de forma telemática”, destacó.
Hasta ahora, los arrendatarios, obligados a hacer el depósito de la fianza ante el IGVS, tenían la posibilidad de acudir a una de las oficinas que el Instituto tiene en las siete ciudades gallegas, donde se les brindaba asesoramiento y ayuda necesaria para la tramitación presencial del depósito.
Con la eliminación de este servicio, este trámite solo se podrá hacer de manera telemática o en el Registro Administrativo sin la opción de recibir asesoramiento. “Muchos [propietarios] se verán prácticamente obligados a acudir a asesorías y gestorías privadas debido a las dificultades para completar el trámite”, considera la diputada del Bloque.