Un tercio de los graduados tecnológicos trabaja en tareas impropias de su formación

Sin embargo, suben al 81% las firmas TIC con problemas para cubrir puestos que exigen STEM | Uno de cada cinco egresados en estas carreras desarrollan su actividad fuera

Programadores de aplicaciones y web, son los más demandados

Programadores de aplicaciones y web, son los más demandados

Carmen Villar

Carmen Villar

De aquí a 2030, ocho de cada diez empleos de los existentes en la actualidad “desaparecerán y serán sustituidos por aquellos que se basen en una formación STEM”, es decir, en estudios vinculados a ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas. Es una previsión de la OCDE y uno de los recordatorios que incluye la Xunta en su último informe sobre talento digital, en el que alude a estudios que avisan también de cómo “el sistema educativo no proporciona suficientes titulados en estas disciplinas para cubrir la demanda”.

No obstante, mientras se acrecienta el porcentaje de empresas del sector TIC (tecnologías de la información y de la comunicación) que se quejan de tener dificultades para cubrir vacantes que requieren este tipo de especializaciones, uno de cada tres titulados en una de estas áreas no desarrolla actualmente un puesto con tareas que requieran nivel universitario y con temática STEM.

En concreto, un 63% de los perfiles STEM gallegos trabajan en aquello para lo que se formaron en la universidad. El resto, no. Se reparten en puestos de dirección de empresas y mandos intermedios (7,8%); ocupaciones que suponen labores técnicas, pero para las que les bastaría una titulación secundaria (casi uno de cada cinco, un 19,5%), y un 9,6 por ciento que no realiza ni trabajo técnico ni directivo.

Estas cifras varían según la formación: son los titulados en Matemáticas quienes en menor proporción realizan tareas “estrictamente” STEM y, a cambio, ganan presencia en otro tipo de encomiendas, como puede ser el ejercicio de la docencia. Lo contrario sucede entre las especialidades más “tecnológicas” –que incluyen las áreas de informática, telecomunicaciones o ingeniería industrial–.

Así lo recoge el informe Talento dixital: estudo da traxectoria profesional dos perfís STEM de Galicia. Edición 2023, a partir del análisis de la trayectoria de 450 titulados entre 1993 y 2019 en grados universitarios tecnológicos a través de sus perfiles profesionales y currículums en la web. Allí describen ocupaciones clásicas –ingenieros, técnicos, docentes, investigadores– y otras nuevas, entre las que destaca el incremento de técnicos y analistas de datos y especialistas en medio ambiente y energías renovables.

Mientras por un lado hay empresas que destinan un elevado porcentaje de personal especializado y formado en la universidad a encomiendas que no se relacionan con su área o su nivel académico, hay firmas del sector TIC que declaran apuros para acceder a este tipo de profesionales. Según el estudio, el “principal problema” del sector TIC e que la oferta “aún es inferior a la demanda” al no poder seguir el paso el sistema educativo a un campo en “constante transformación”. “Hallar los candidatos cualificados adecuados para cualquier proceso de selección es complicado, cuando hablamos de perfiles STEM, este reto se amplía mucho más cada año”, sostiene el documento, elaborado por el Observatorio da Sociedade da Información e a Modernización de Galicia (Osimga), dependiente de la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia (Amtega).

Así, en 2022, en una encuesta del mismo organismo a más de 440 compañías TIC, el 81,1% alegó que le resultaba difícil o muy difícil cubrir puestos que requieran estas titulaciones STEM, “una percepción de dificultad” que creció un 10,5% en dos años. No se trata solo, no obstante, de no disponer de titulados en esas carreras, sino que el principal obstáculo sería la falta de experiencia para un 52% de las firmas, seguido por los costes de contratación, que mencionan la mitad, y de la carencia de candidatos con conocimientos adecuados.

Además de los profesionales que se dispersan en tareas para las que no se precisa su formación en Galicia, otros se van fuera, aunque menos. El informe recurre al estudio de la Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia para señalar que un lustro después de dejar la facultad uno de cada cinco titulados STEM que trabaja no lo hace en Galicia, si bien hace dos años era uno de cada cuatro. Ese mismo estudio de la ACSUG señala que el 81,8% de estos graduados desarrolla funciones universitarias, lo que se ve “óptimo”, aunque supone retroceder desde el 86,7% asociado a este indicador dos años antes.

El informe advierte que el sistema educativo no forma a suficientes titulados STEM, a pesar de que el número de universitarios en estas carreras creció un 3,6% en los dos últimos años en un contexto de “estancamiento” del alumnado total. Ese talento es, en su mayoría, masculino. Según el estudio, en FP sólo un 12,4% de los estudiantes de especialidades STEM es mujer y si bien añade que en Bachillerato el sexo femenino constituye un 47,5% de la rama de Ciencias y tecnología, al llegar a los campus cae al 34%.

La brecha es más “notable” en áreas como informática y tecnologías de la comunicación, donde los hombres, añade, son “amplia mayoría” en 2021-22: solo un 13,8% de la matrícula es femenina, frente al 28,5% en el resto de ingenierías.

Si bien el análisis afirma que la presencia de mujeres iría a más en las ramas “más minoritarias”, avisa que “tiende a reducirse en el caso de matemáticas” cuando en 2015-16 la situación era “de equilibrio”. “Aparentemente, conforme el grado en matemáticas es cada vez más reconocido por su relación con la tecnología y las comunicaciones, aumenta su atracción para los hombres o pierde interés para las chicas”, señala.

El 87% de graduados STEM trabajan a los cinco años de salir de la universidad, un 4,1% más que en la edición previa del estudio. El sector TIC es su “principal” empleador. Según el informe, los perfiles concretos que demanda en este sector serían, sobre todo, los vinculados con programación, desarrollo de aplicaciones web y de software en general (demanda del 48,1% de empresas); con tecnologías cloud (25,6%), gestión del dato (23,2%) y ciberseguridad (20,8%), y con conocimientos en inteligencia artificial (18,2%).

Las compañías gallegas también ponen deberes de formación. En concreto, se centrarían en el ámbito de la ciberseguridad, los entornos de programación, las bases de datos, el desarrollo de sistemas informáticos y la gestión del dato.

La formación continua es una de las características de la trayectoria profesional de los especialistas STEM. El informe indica que más del 57% de los perfiles de estas características analizados amplía sus cualificaciones mediante un máster o un doctorado; uno de cada cinco, opta por formación no reglada y privada y uno de cada ocho egresados en estas áreas amplía sus estudios con un segundo grado universitario. 

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