La inversión extranjera se desploma un 65% en Galicia, la tercera mayor caída del Estado

A Galicia le cuesta históricamente atraer inversión extranjera pero el pasado año fue especialmente flojo. Entre enero y septiembre solo logró captar 26,5 millones de euros, un 65 por ciento menos que el mismo periodo del año anterior. Y esto sucede en un contexto de incremento del capital foráneo que llega a España: casi un 55 por ciento más respecto a 2021. De hecho, solo en siete comunidades bajó la inversión y la comunidad gallega se situó como la tercera con mayor caída.

Pero no es el único dato desalentador. Si históricamente Galicia apenas captaba el 0,7 por ciento de la inversión extranjera que llegaba a España, el pasado año –con los datos de los primeros nueve meses que son los que tiene contabilizados hasta ahora el Ministerio de Industria– se queda en un escaso 0,11 por ciento de todo el capital foráneo que aterriza en el territorio español.

Tres comunidades acaparan el grueso de las inversiones: solo Madrid atrae el 64 por ciento, Cataluña obtiene el 11 por ciento y País Vasco llega al 10 por ciento. Pero hasta comunidades limítrofes con Galicia consiguen un trozo más grande de la tarta: Castilla y León recibió 408,6 millones de euros, el 1,8 por ciento del total, y Asturias 273,9 millones (el 1,2 por ciento del conjunto estatal).

Expertos

Los economistas explican que el dato de inversión extranjera es muy cambiante. Basta una gran operación, como la compra de una empresa, para que se disparen las cifras. Y en 2022 no hubo ninguna. “Aunque históricamente Galicia tiene un problema por su falta de atractivo, el pasado año no ha sido muy bueno”, reconoce el profesor de Economía Financiera de la Universidade de Santiago, Luis Otero.

Esto, sin embargo, es especialmente llamativo en un contexto en el que la llegada masiva de fondos europeos está movilizando nuevos proyectos e inversiones. El catedrático de Economía Aplicada, Fernando González-Laxe, pone como ejemplo la fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, que está pendiente de obtener fondos Next Generation, pero que aún no se han concretado.

“Con los fondos europeos vamos muy retrasados. El dinero no está llegando al tejido industrial, sobre todo a las pymes”

Pelayo Novoa

— Socio director BDO en Galicia

“Con los fondos europeos vamos muy retrasados. El dinero no está llegando al tejido industrial, sobre todo a las pymes”, explica el socio director de la auditora BDO en Galicia, Pelayo Novoa.

Los expertos coinciden en que las incertidumbres generadas por la guerra de Ucrania no son un factor que esté desalentando la inversión empresarial. En todo caso, en el plano internacional el economista Albino Prada apunta que detrás de la política de EEUU de continuas subidas de los tipos de interés hay una estrategia para captar más inversiones para su territorio, lo que va en detrimento de Europa.

Aún así, España atrajo entre enero y septiembre de 2022 un total de 22.457 millones de euros frente a los 14.501 millones del ejercicio anterior. Comunidades como Asturias multiplicaron por 15 el capital foráneo que lograron atraer. En Navarra se elevó un 900 por cien y en el País Vasco un 630 por cien. Solo bajó la inversión extranjera en Andalucía, Aragón, Cantabria, Extremadura, Galicia, La Rioja y Murcia.

Pero el problema ya viene de atrás. “Galicia históricamente ha recibido un porcentaje muy inferior de fondos extranjeros en relación a su PIB”, apunta Pelayo Novoa.

Razones

¿Y cuáles son las causas? El socio director de BDO cree que la situación periférica de Galicia puede perjudicarla, a lo que se suma un tejido productivo conformado por empresas pequeñas: “demasiadas pymes”. “También hay un tema de cultura financiera: aquí lleva más tiempo hacer una inversión. Los empresarios gallegos somos más reservados, más desconfiados, nos cuesta más abrirnos a compartir capital, a asociarnos”, explica. Por otro lado, apunta a la fuga de capital hacia el Norte de Portugal, “con mano de obra más barata, más subvenciones y más facilidades para establecerse”.

Pero además hasta ahora en Galicia el sector de la automoción atraía capital de fuera. Sin embargo, últimamente las inversiones en este sector se están trasladando a otros países como Asia o Sudamérica, según apunta el economista José Luis Outes

Algunos expertos quitan hierro, sin embargo, al escaso porcentaje de inversión extranjera que recibe Galicia. “Eso significa que tampoco nos vienen a colonizar desde fuera”, ironiza González-Laxe. El doctor en Económicas, Antonio Grandío, explica que la inversión extranjera “nunca fue el motor principal” de la economía en Galicia, donde siempre tuvo más peso el capital de procedencia nacional.

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