Apuran el rescate del autobús del río Lérez: contrarreloj y contra los elementos

Los técnicos están analizando "diferentes fórmulas" para poder sacar el autobús accidentado en Nochebuena del cauce del río Lérez, ha señalado el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones. Se trata de una operación "muy complicada" debido a la crecida del caudal del río "porque la presión es mucha" y por el peso de la carga: por un lado, las grúas tienen que izar el autocar sin que este se parta y, por el otro, el propio puente debe soportar las maniobras.

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Esta operación, además, debe realizarse a contrarreloj y contra los elementos. Hay, según José Miñones, una "ventana de tiempo" hasta el próximo jueves, cuando volverán las lluvias, para ver si baja el caudal del río "y podemos aprovecharlo para el rescate", de ahí que estos días se vayan a realizar diferentes pruebas de carga.

La prioridad de los investigadores es recuperar el autobús "tal cual está", en las mismas condiciones que se encuentra tras el accidente, pero si no es posible se estudiarán otras fórmulas, entre ellas partir los restos para que sean más fáciles de manejar.

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El estado del Lérez tampoco ha permitido, hasta ahora, recuperar el tacógrafo del autobús, que puede dar pistas sobre lo sucedido en el momento del accidente, ha desvelado el director general de Emergencias de la Xunta de Galicia, Santiago Villanueva.

La investigación, según ha expresado Villanueva, "es de gran envergadura" por lo que "hará falta tiempo" para que estos trabajos avancen, ya que la recuperación del autobús "hoy no se hará". Este operativo se desarrollará "lo más pronto posible", ha defendido el dirigente autonómico, "en cuanto digan los técnicos", debido a las que las condiciones actuales son "sumamente difíciles".

La mala meteorología como posible causa

La mala meteorología que se registraba en Nochebuena en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra), que complicó el estado de la carretera, es "uno de los factores" que estaría detrás del accidente del autobús que cayó al río Lérez causando siete muertos.

Así lo ha sostenido este lunes el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, que ha asegurado que "todas las hipótesis están abiertas" hasta que avance esta investigación, que realizará la Guardia Civil con el apoyo de un "grupo especial".

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Habrá que esperar a los resultados de estas pesquisas "para saber exactamente las causas y los motivos", según Miñones, un trabajo para el que será clave la recuperación de los restos del autobús accidentado, que sigue dentro del río Lérez.

Un minuto de silencio y consternación

Vecinos, autoridades y cuerpos de emergencias del municipio pontevedrés de Cerdedo-Cotobade han participado este mediodía en un minuto de silencio y "consternación colectiva" en memoria de las siete víctimas mortales del accidente de autobús, así como para expresar su solidaridad con los dos supervivientes.

La concentración ha estado presidida por el alcalde, Jorge Cubela, que a primera hora de este lunes se desplazó también hasta el lugar del accidente. Además, en ella han tomado parte el resto de la corporación, vecinos, representantes de Protección Civil y Guardia Civil y el director xeral de Emerxencias, Santiago Villanueva.

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Cubela ha pronunciado unas palabras en nombre de la corporación municipal para testimoniar "el dolor y la solidaridad" con las familias de las víctimas, que "sufrieron la fatalidad de perder en unas fechas tan señaladas como estas a sus seres queridos de un modo injusto y totalmente inesperado".

Cerdedo Cotobade, igual que Nigrán, Agolada y Lalín, municipios de origen o residencia de los fallecidos, han decretado días de luto oficial con banderas a media asta. Del mismo modo, también la Diputación de Pontevedra ha decretado luto oficial, y las banderas de sus edificios ondean a media asta. La presidenta provincial, Carmela Silva, ha trasladado su pésame a las familias y amigos de las víctimas, al tiempo que ha agradecido la labor e implicación de los servicios de emergencias.