Galicia formará a alumnado, profesorado y progenitores para prevenir el acoso escolar

Se busca “tolerancia cero” contra los ataques desde Primaria y en conflicto se apuesta por mediar y restaurar la convivencia | En las aulas se detectará violencia de género

Escolares a la salida del colegio.

Escolares a la salida del colegio. / Europa Press/David Zorrakino

Carmen Villar

Carmen Villar

“Tolerancia cero” hacia el acoso escolar y el ciberacoso y contra la violencia de género y la LGTBIfobia. Ese es el “mensaje claro” que deben transmitir todos los miembros de la comunidad educativa de Galicia: alumnos, docentes y familias. Es uno de los “retos” que asume la Estratexia de Convivencia Escolar 2025 de la Xunta y para lograrlo apuesta por la educación. Porque más vale prevenir conductas contrarias al buen clima en las aulas que lamentarla, y lo primero es formar, pero, llegado el caso, esa misma comunidad debe saber detectar el conflicto cuanto antes y abordarlo, un terreno en el que la Consellería de Educación apuesta por la mediación y diálogo para “restaurar” las relaciones. Para orientar las actuaciones concretas y asistir en los procesos, también trabajará en varias guías con las que busca la prevención y la detección precoz de la violencia de género o la intervención en casos de maltrato infantil. 

Las estrellas de Educonvives en los próximos años, con todo, serán el acoso escolar y ciberacoso, con el lanzamiento de un plan “integral” contra ambas conductas que había sido ya comprometido por el anterior mandatario de la Xunta con el argumento de que “el bullying no es una cosa de niños, sino un problema en el que hay víctimas que hay que proteger”, y refrendado por el actual en su investidura. En ese abordaje global, las redes sociales son un frente de prioritario al ser la principal zona de conflictos según el alumnado.

UN BUEN CONTEXTO, PERO CON ASPECTOS MEJORABLES

Aunque Educación subraya los buenos datos de sus encuestas, donde nueve de cada diez consultados no percibe problemas de convivencia en los centros o, de haberlos, “puntuales”, la Xunta cree que “hay aspectos susceptibles de mejora”, de ahí la Estratexia actualizada con el foco en la prevención, en un abordaje de los conflictos “constructivo”, en el cuidado del bienestar emocional, en la coeducación y en el impulso a centros “libres de estereotipos” y violencia de género. Los profesores deben dar ejemplo de “adecuada gestión” de sus emociones y formarse en la misma medida que en su materia en convivencia, coeducación y educación emocional.

FORMACIÓN Y ASESORAMIENTO ESPECIALIZADO

Los centros dispondrán de asesoramiento especializado y recursos de apoyo, pero también las familias, a las que se ofertará formación en materia de convivencia y conducción y, “en especial”, en habilidades relacionales, y los alumnos, donde se incidirá en el respeto a la diversidad o la empatía. En números, y solo para los docentes, la Xunta aspira a que crezcan un 80% los profesionales “altamente cualificados” en convivencia, coeducación y educación emocional.

RESOLVER LOS CONFLICTOS DE OTRA MANERA

A la hora de resolver conflictos, Educación propone elaborar, entre otras, una guía de prácticas restaurativas: en vez de un abordaje punitivo del conflicto, se opta por primar el diálogo, creando entornos que animen a participar y restaurando –recomponer– las relaciones. La mediación se considera clave y se contemplan programas que pueden derivar a la implantación de un servicio específico en el centro o a iniciativas de ayudas entre iguales. Trabajar las competencias sociales es básico para eso y las buenas prácticas en convivencia optarán a premios.

EL FRENTE DEL CONFLICTO: LAS REDES SOCIALES

Para conseguir una “convivencia digital responsable”, saber manejarse en el ciberespacio es un primer paso y de ahí el interés de la Xunta formar a escolares y a sus familias en un uso “correcto y seguro” de las TRIC (las TIC de siempre con la R de Relación), pero además se enseñará a los niños a identificar las conductas de acoso –un estudio de Unicef demuestra que muchas veces no lo son–, a afrontarlas y a pedir ayuda, se impulsará un programa que busca su compromiso en no tolerar estas situaciones y se concienciará a la familias en pro de “desnormalizar” estas conductas. Para esto último, se creará un canal de formación digital en el Portal das Familias. Ya existe un protocolo para prevenir, detectar y tratar el acoso y el ciberacoso, pero se actualizará para “mejorar” la identificación y resolución.

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La Xunta hace suyo el adagio clásico mens sana in corpore sano en su Estratexia de Convivencia Escolar, pero pone el foco no solo en atender el “equilibrio dietético” en la alimentación y el fomento de la actividad física en alumnos, sino también en la prevención de conductas “problemáticas y adictivas”. La meta es que al menos uno de cada cinco se beneficie de programas de promoción de estilos de vida saludables.

Con ese desafío en el horizonte, Educación propone implementar un programa “universal de prevención” para todos los alumnos desde Primaria a la ESO. Los profesores, formados y en colaboración con técnicos de prevención, deberán preparar actividades para conseguir “hábitos y formas saludables de ocupación del ocio” e informarán a sus estudiantes sobre posibles riesgos asociados al juego y los videojuegos, internet y las redes sociales. Se atenderá de forma especial alumnado vulnerable. La Xunta es consciente asimismo de que precisa un “respaldo activo” de las escuelas de padres y madres para poder formar e informar a los progenitores y, en escolares con un nivel elevado de riesgo “psicosocial”, propone actividades conjuntas entre docentes y familias y habla de mentorización.

La Estratexia enfatiza el bienestar emocional, un apartado en el que la Xunta prevé un programa de promoción de la salud mental, en colaboración con Sanidade, para formar a profesores y a alumnos y para “romper mitos” y “sensibilizar” a la comunidad educativa. En el caso de los padres, se plantea formarlos para que sepan detectar cuanto antes “desajustes emocionales” en sus hijos y dotarles de recursos a los que puedan recurrir, tanto dentro del centro como fuera.

Otro eje de la Estratexia es el refuerzo de los sistemas de detección de situaciones de violencia de género cometidas sobre los escolares. Educación desarrollará un programa piloto de educación afectivo-sexual con un abordaje integral, como el pensado para el acoso, destinado a todas las etapas educativas. La Xunta también pretende medir hasta dónde llegan la violencia de género y LGTBI en las aulas o analizar los estereotipos de género en el alumnado de FP.

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