Abrasiones en manos, rodillas y cortes en nariz y labios. Desembarcar de un avión puede ser más peligroso de lo que parece. Lo atestiguó un pasajero que aterrizó en una nave de Ryanair en diciembre del año pasado en el aeropuerto de Santiago. Pero el suyo no era un caso aislado. Misma compañía, mismo modelo de avión y mismas escaleras. El tipo de accidente era tan repetitivo que la Comisión de Investigación de Accidente e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) dependiente del Ministerio de Transportes tuvo que abrir varias investigaciones. La última, referida a lo ocurrido en Galicia.

¿Qué ocurrió en Lavacolla? El último susto, cuyos resultados de la investigación acaban de hacerse públicos, ocurrió el 21 de diciembre de 2021 en un avión de la low cost irlandesa que acababa de estacionar en Santiago procedente de Valencia.

El pasajero sufrió abrasiones en las palmas de las dos manos, la rodilla derecha y cortes en la nariz y en los labios

"A las 13.35 horas comenzaron a desembarcar los pasajeros por las escaleras delanteras de la aeronave. Uno de ellos, que transportaba una maleta en una mano y un abrigo en la otra, cayó desde los últimos tres escalones de las mismas", se describe en el informe final de la CIAIAC. Pero lo que podría considerarse un tropiezo más en un aeropuerto, acabó en investigación.

Pasajeros descendiendo por las escalerillas delanteras de un avión de Ryanair. David Borrat

Los daños que tuvo el hombre no fueron menores. "Sufrió diversas abrasiones en las palmas de las dos manos, la rodilla derecha y la nariz además de cortes en la nariz y en los labios", se explica en el informe.

Más caídas

Pero no fue solo esta caída la que provocó que las escalerillas retráctiles e integradas que tienen algunos aviones de Ryanair (Boeing 737-8AS) en la parte delantera acabaran en el punto de mira de la CIAIAC.

Antes del incidente en Galicia se habían registrado otros cuatro similares en España cuando los viajeros bajaban por ellas: el 12 de mayo de 2021 en Alicante (puede consultarse en informe completo en este enlace); el 13 de junio en Málaga (consulta el informe aquí) y el 16 de julio otras dos: en Málaga y Valencia. A mayores, el 12 de febrero de 2022 se registró una, también en Alicante.

Antes del accidente de Santiago hubo otros cuatro similares en España

Este elevado número de caídas en en circunstancias similares llevó a la CIAIAC a emitir una serie de recomendaciones de seguridad a la aerolínea tras la investigación del primer incidente en Alicante el 12 de mayo de 2021 y que ha considerado suficientes para paliar accidentes como los ocurridos posteriormente, entre ellos el sucedido en Galicia.

¿De quién fue la culpa?

Detalle de las escalerillas delanteras de algunos aviones de Ryanair. CIAIAC

La investigación abierta por la caída del pasajero en Santiago concluye que la causa del accidente fue porque el pasajero descendió por las escaleras con una maleta en la mano y un abrigo en la otra, lo cual —asegura la CIAIAC— no era acorde con las instrucciones de desembarque. Entre ellas, por no haber atendido a la advertencia de sujetarse con una mano al pasamanos de la escalera, tal y como se informa en un letrero a la salida de la aeronave. Pero este no sería el único aviso que dio la aerolínea.

Tras la primera investigación por el accidente de Alicante, la CIAIAC planteó varias recomendaciones a Ryanair que teóricamente la aerolínea estaría ya cumpliendo:

  • Modificar su procedimiento de desembarque a fin de que también dé su aviso sobre el uso de pasamanos al bajar las escaleras en el idioma oficial del país en el que despega y aterriza (y no solo en inglés). En el caso gallego, el viajero aseguró en la investigación que no escuchó ni entendió ninguna instrucción de cómo desembarcar.
  • Recomendar a Ryanair que refuerce su procedimiento de desembarque de tal forma que si la tripulación de cabina de pasajeros observa que algún pasajero se dispone a descender por las escaleras delanteras sin una mano libre le recuerde la obligación de usar el pasamanos al bajar esta escaleras.

Avisos de peligro junto a las escalerillas delanteras de los aviones de Ryanair. CIAIAC

La CIAIAC reconoce además que ya en 2007 Ryanair había implementado las recomendaciones que había realizado la FAA para las escalerillas retráctiles de este tipo de aviones como instalar material antideslizante en la plataforma superior y en los pasamanos laterales.

A mayores, la aerolínea en 20210 decidió implementar en ellas barreras de seguridad visuales, retráctiles y rieles desmontables.