Unas vienen y otras se van. Así funciona la oferta de titulaciones de las universidades gallegas desde hace unos años, con el objetivo de adaptarse a la realidad demográfica y a las necesidades de la sociedad en la que están insertas. Hasta 2026, en el sistema universitario gallego había programada una actualización potente, con una docena de grados y quince nuevos másteres. En buena parte, los grados ya están disponibles entre las cerca de 180 opciones que integran el catálogo de estudios en la comunidad, entre las titulaciones, su versión a distancia o en inglés cuando la tienen y la posibilidad de cursar simultaneidades. Para el curso que viene, la oferta previsiblemente engordará de nuevo, después de que el Ministerio de Universidades flexibilice los nuevos trámites necesarios que estableció para impartir estudios en los campus, que esta vez han complicado la fase de verificación de los títulos e incluso puesto en cuestión, según denunció la propia Xunta, que llegasen en fecha al calendario. Así, este curso la decisión se supeditaría solo a la aprobación de Galicia.
“En cuanto la comunidad autónoma lo autorice, ya se podrían ofertar estas titulaciones”, indican desde la Universidade de Santiago (USC) en alusión a dos de los grados en juego, Inteligencia Artificial y Gestión de Empresas Hosteleras, y tras explicar que el Gobierno, en respuesta este mismo mes a una consulta realizada por la CRUE, estableció que, conforme a un acuerdo de buenas prácticas aprobado por la Conferencia General de Política Universitaria, los planes de estudios que estén verificados y autorizados por la comunidad antes del 15 de septiembre de cada año podrán formar parte de la oferta de plazas de dicho curso y, por tanto, impartirse.
La verificación pasaría, eso sí, por el informe favorable de la Acsug (Axencia para a Calidade do Sistema Universitario de Galicia) y varios títulos (Inteligencia Artificial, Relaciones Internacionales o Gestión de Empresas Hoteleras) ya lo han recibido. En la UVigo estarían pendientes todavía del informe previo de la Secretaría Xeral de Universidades los grados de Diseño y de Automoción mención Dual, apunta Alfonso Lago, que ha asumido el cargo de vicerrector de Titulacións de la UVigo, Su homóloga de Santiago, María José López, indica que el siguiente paso depende del Consejo de Universidades, pero lo usual es que se pronuncie en el mismo sentido de la Acsug, y desde A Coruña, por ejemplo, dan por “seguro” que contarán con Relaciones Internacionales para 2022-23, mientras en la UVigo sostienen que es “probable” que los títulos ya enviados al Ministerio puedan impartirse el curso que viene.
En marzo la Consellería de Educación lanzaba la voz de alerta: un decreto estatal había peligrar la implantación de una docena de titulaciones, incluidas las que constituyen el catálogo inicial de la Universidad Intercontinental de la Empresa, promovida por Abanca y Afundación, en una situación “idéntica” al resto.
La Xunta concretaba que la implantación de los grados cuyo estreno estaba previsto en 2022-23 podía verse “comprometida” de no “flexibilizar” el Gobierno sus nuevas exigencias. Alegaba que el cambio en las reglas de juego de Universidades había pillado a los campus gallegos por sorpresa dado que, si hasta ahora bastaba con el visto bueno de la comunidad para impartir la docencia del título, la normativa ahora exigiría más pasos, como que el carácter oficial del título deba ser establecido por el Consejo de Ministros y publicado en el BOE.
Finalmente, a tenor de lo trasladado por Universidades a la Conferencia de Rectores, se simplificarían por ahora los requisitos al dejar en manos de la Xunta la decisión. Por su parte, desde la Consellería de Educación solo indicaron a este diario que el proceso de verificación está siguiendo su “procedimiento habitual” y la oferta se hará pública pronto.
Las universidades públicas gallegas pretenden estrenar el próximo curso cinco grados. Dos son interuniversitarios: dependen de dos de las universidades, caso de Relaciones Internacionales, con Vigo y A Coruña como implicadas, o de las tres. Esta última es la situación en Inteligencia Artificial, una titulación muy disputada por los campus por la demanda que se prevé para sus graduados. Al final, se resolvió con una decisión salomónica: las plazas se reparten entre todas.
