Alberto Núñez Feijóo puso este viernes punto y final a su periplo al frente de la Xunta tras 13 años y 11 días. El político de Os Peares formalizó su renuncia para dedicarse a tiempo completo a la Presidencia del PP nacional a la que accedió de forma precipitada tras ser defenestrado Pablo Casado por su guerra con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Tras oficializarse este sábado su dimisión en el Boletín Oficial del Estado, tanto Feijóo como todos sus conselleiros pasarán a estar en funciones hasta que Alfonso Rueda asuma el relevo previsiblemente el 14 de mayo y designe nuevo gobierno. En su despedida el presidente de la Xunta reivindicó su liderazgo “no por el vacío que deja” sino por “la continuidad y la unidad que garantizan”. De hecho, reivindicó su legado, del que dijo sentirse “orgulloso”: unidad, moderación y galleguismo. Y apeló a mantenerlo en la nueva etapa.
“No tengo ninguna duda de que el galleguismo constitucional que heredé de los presidentes Albor, Laxe, Fraga y Touriño, será también la guía de quien coja ahora el relevo para que siga siendo parte de nuestro acervo colectivo”, señaló en una declaración institucional en el Pazo de Raxoi de Santiago en la que emocionado repitió las mismas palabras que pronunció en su toma de posesión el 18 de abril de 2009 cuando accedió por primera vez a la Presidencia de la Xunta: “Seguiré siendo un gallego más para siempre”.
Casi un mes después de ser elegido presidente del PP nacional, Feijóo deja el Gobierno gallego según el calendario previsto. A primera hora de la mañana entregó al presidente del Parlamento, Miguel Santalices, su carta de dimisión, de la que ya informó también al Rey y al presidente del Gobierno. Previamente mantuvo un encuentro con el grupo parlamentario popular. Poco después reunió en Raxoi a su gabinete en un Consello de la Xunta extraordinario para trasladarles su renuncia. Todos los conselleiros arroparon al presidente en su despedida, salvo la responsable de Emprego, María Jesús Lorenzana, que no pudo acudir por motivos personales. Curiosamente tras el Consello de la mañana, Feijóo volvió a reunir a sus conselleiros por la tarde. El encuentro fue “protocolario”, según algunas fuentes. Otras apuntan a que tuvo más calado ante la nueva etapa que se abre en la Xunta y el PPdeG.
El quinto presidente de la historia de la autonomía se convirtió este 29 de abril en el primero que renuncia a su cargo. “La plena normalidad con la que se está a efectuar esta renuncia, aún siendo un escenario inédito, es una prueba más de la solvencia de nuestra autonomía”, destacó.
Tras suceder a Manuel Fraga en 2006 al frente del PPdeG logró su primera victoria electoral en 2009, a la que siguieron otras tres mayorías absolutas. “Doy fe de que, aunque los comienzos hace trece años pudieron parecer difíciles, lo más complejo es tener que ponerle fin a este periodo”, reconoció el presidente en funciones.
En su despedida reconoció “errores” por los cuales pidió perdón a los gallegos y “aciertos” que, en un ejercicio de modestia, hizo extensivos a “todos”. “En todos estes años di todo de lo que fui capaz”, comentó.
Rodeado de los conselleiros y los delegados territoriales de la Xunta, Feijóo justificó su decisión de marcharse: “nunca llegué a imaginar que la política en España, el interés general iba a ser rehén de la frivolidad, la polarización y el populismo”. Y dejó clara su intención de replicar en España el modelo gallego: “No quiero ni puedo compartir la premisa de que en el conjunto de España es imposible lo que sí fue posible en Galicia”.
Recalcó los valores de “unidad” y “moderación” que sustentaron la estabilidad en Galicia, así como la democracia representativa y el autogobierno de la autonomía. “Precisan ser cultivados sin pausa para evitar el retorno a épocas funestas y rupturas traumáticas con la legalidad”.
A pesar de que, según dijo, nunca gobernó “para alimentar una vanidad personal” hizo balance de sus logros al frente del Gobierno: hospitales y centros de salud nuevos, tasas de fracaso escolar reducidas, menos impuestos, la gratuidad de las escuelas infantiles... También recordó los momentos malos: la crisis de 2009, los incendios, Angrois, la pandemia, el hundimiento del Villa de Pitanxo...
Y con la voz quebrada y al borde del llanto, llegó a los agradecimientos, entre los que incluyó a los conselleiros, incluido el fallecido Valeriano Martínez, los altos cargos de la Xunta, los profesionales sanitarios, empresas, sindicatos y también la oposición e incluso su familia: “en este tiempo viví los mejores y los peores momentos a nivel individual”.
Aunque ahora se marcha aclaró que la distancia será “física, pero no anímica”. “Hay una mezcla de tristeza y satisfacción en mi estado de ánimo", reconoció.
“Fui y seguiré siendo discípulo de Galicia. De Galicia aprendí que gobernar consiste en dialogar”, expuso. E insistió en la importancia de mantener la unidad. “Los modelos políticos consistentes comienzan y finalizan en grandes mayorías. Surgen de un amplio respaldo popular y puede decirse que tienen éxito si finalizan con una sociedad unida y no fracturada”, reivindicó, apelando a la Galicia cordial.
Además se comprometió a seguir sirviendo a Galicia desde su nuevo cargo al frente del PP. “Se puede seguir siendo discípulo de Galicia asumiendo otras responsabilidades”, proclamó.
Se activa el calendario para el relevo en la Xunta
Tras entregar su carta de renuncia al titular del Parlamento, Miguel Santalices, se activa el calendario para nombrar nuevo presidente de la Xunta. Aunque el plazo máximo es de un mes, se acortarán los tiempos. El próximo lunes el máximo responsable de la Cámara inicia la ronda de consultas con los grupos parlamentarios para proponer candidato a la Presidencia de la Xunta. El miércoles 4 de mayo se convocará la junta de portavoces que organizará el pleno de investidura. La mayoría absoluta del PP garantiza que Alfonso Rueda sea el único candidato que se presente a la investidura que se celebrará probablemente el 10 y 12 de mayo, de manera que podrá tomar posesión como presidente de la Xunta el sábado 14. Alberto Núñez Feijóo acudió ayer por la mañana al Parlamento para hacer entrega de su carta de renuncia a Santalices, con el que bromeó: “tenía que entregarle la carta a uno de Ourense, porque saben leer entre líneas”. En esta misiva comunica su decisión de dejar un cargo que ejerció “con la mayor entrega, responsabilidad y lealtad”. “No podré olvidar la confianza depositada en mi ni devolver el cariño que recibí”, escribió. Y añadió de forma manuscrita: “Gracias a todos los gallegos por darme el honor de servir a la tierra madre. No importa donde, Galicia siempre”, concluyó.
Rueda, único candidato a presidir el PP gallego
El actual número dos de la Xunta y líder del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda, fue proclamado como único candidato a la Presidencia del Partido Popular de Galicia, que celebrará su congreso extraordinario el 21 y 22 de mayo para eligir al sucesor de Alberto Núñez Feijóo. Así lo trasladó ayer la presidenta de la Comisión Organizadora del congreso, Elena Candia, que aseguró que al haber una única candidatura no se celebrarán votaciones en las agrupaciones locales
