Los 1.200 sanitarios que fueron incorporados como refuerzo durante la pandemia extinguen su contrato a finales de diciembre y, por lo tanto, dejarán de trabajar en el sistema gallego de salud. La Consellería de Sanidade explica que este contingente se contrató en un contexto de pandemia de forma puntual y solo por un periodo determinado mientras durasen las necesidades derivadas de la crisis sanitaria. En todo caso, desde el Sergas aseguran que analizarán con los sindicatos “posibles prórrogas”. Según explican, no pueden renovar automáticamente estas contrataciones por lo que deben estudiar “fórmulas legales” si quieren retenerlos en el Sergas.
“Vamos a tener una reunión con los sindicatos para tratar el asunto de la finalización del contrato y ver posibles prórrogas en circuitos COVID que permanecerán previsiblemente el año que viene, vacunación, prueba o refuerzos para PCRs”
Aclaran, en todo caso, que estos 1.200 profesionales fueron incorporados de forma excepcional para satisfacer las necesidades surgidas durante la pandemia. Los contratos, bajo la modalidad de nombramientos eventuales, se hicieron con una duración máxima de un año y vencen a finales de diciembre.
Se trata de todo tipo de profesionales sanitarios, desde médicos a enfermeras, auxiliares de enfermería o técnicos de laboratorio, según explican desde el Sergas. Y ejercen sus funciones tanto en Atención Primaria como en los hospitales. La contratación de estos 1.200 sanitarios sirvió para reforzar la mayor actividad hospitalaria derivada del incremento de contagios, para elevar la capacidad de diagnóstico y rastreo de nuevos casos y también para agilizar la vacunación.
Con una incidencia a 14 días instalada en torno a 14 casos por cada 100.000 habitantes, la pandemia en Galicia está bajo mínimos. Las hospitalizaciones han caído y solo quedan 25 personas ingresadas. Los vacunódromos se han desmontado, aunque no se descarta recuperarlos para poner la tercera dosis de la vacuna a la población.
En todo caso, aunque el COVID está dando un descanso a la sanidad gallega, el déficit de personal, sobre todo en Atención Primaria, sigue siendo acuciante. En los centros de salud los facultativos se sienten sobrecargados y llevan tiempo reclamando refuerzos. No solo es una demanda de los profesionales del Sergas sino que la Consellería de Sanidade también ha reconocido la dificultad para encontrar sanitarios, sobre todo médicos y enfermeras, para cubrir bajas.
Pero la sanidad gallega no es la única que perderá sus efectivos de refuerzo por el COVID. En Andalucía, por ejemplo, ya avanzaron que los 21.000 profesionales contratados para dar respuesta a la pandemia dejarán de trabajar el 1 de noviembre. Otras comunidades como Cataluña, Baleares, Canarias y La Rioja pelearán por mantener en plantilla a estos trabajadores.
En Galicia el Sergas no tiene claro que sea posible prorrogar estos contratos y asegura que lo abordará con los sindicatos. Tampoco concreta si, en caso de poder renovar estas vinculaciones, mantendrá en plantilla a la totalidad de los 1.200 efectivos de refuerzo o solo a una parte.
El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, anunció ya una batería de enmiendas a los Presupuestos de la Xunta para exigir a la Xunta que dé marcha atrás en la rescisión de los contratos de los profesionales sanitarios contratados como refuerzo para luchar contra el COVID y en el recorte de fondos para la Atención Primaria.
“El PP es un riesgo para la sanidad pública que los gallegos no nos podemos permitir”, denunció Caballero. “No aprenden de lo que pasó en tiempos de COVID: hay que fortalecer la sanidad”, lamentó el líder socialista.