El puente más emblemático de Oporto e icono turístico de Portugal estrena restricciones. Desde esta semana el tránsito por el majestuoso viaducto metálico sobre el río Duero que conecta la "invicta" con Vila Nova de Gaia queda limitado.

Las restricciones afectan al tablero inferior y se alargarán durante un año.

Durante los próximos doce meses el puente de Don Luis I quedará completamente cerrado al tráfico de vehículos. Sí se mantendrá el de peatones, aunque portugueses y turistas extranjeros deberán caminar entre obras. Afectará solo al paso inferior.

¿Por qué se cierra? El puente de Don Luis I, principalmente su tablero inferior por el que circulan peatones y vehículos, va a ser sometido a una importante rehabilitación para reforzarlo y también eliminar sus vibraciones. Tiene un presupuesto de 3,3 millones de euros.

Así es el proyecto que lo convertirá solo en peatonal

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A mayores, aunque con la vista ya puesta en 2025, se pretende crear un nuevo puente para vehículos sobre el río Duero (se bautizará como D. António Francisco dos Santos). Una vez culminada esta nueva infraestructura, las autoridades lusas pretenden que el puente de Don Luis I quede para uso exclusivo de peatones (además de metro que discurre por el tablero superior).