Sin más profesionales sanitarios no se solucionará la sobrecarga en Atención Primaria. Así de rotundos se expresaron médicos y enfermeras durante la reunión del Consello Técnico de Atención Primaria celebrada ayer donde la Consellería de Sanidade avanzó que se ampliarán las funciones del personal de enfermería y de farmacia para descargar así a los facultativos de algunas labores y contribuir a descongestionar este nivel asistencial. Además se impulsará un protocolo para unificar la atención a domicilio de pacientes puesto que ahora este servicio se organiza de forma diferente en función del centro de salud.

Sindicatos y organizaciones profesionales ven “poco concretas” las propuestas del Sergas para mejorar la crítica situación que atraviesa la Atención Primaria y exigen que se vaya al fondo del problema: “la falta de recursos”.

Sanidade puso fecha en el calendario a algunas de las medidas acordadas por los grupos de expertos creados para mejorar Atención Primaria. Así, antes del 7 de septiembre se creará un “cuadro de mando” que ayudará a los responsables de los centros de salud a planificar su actividad asistencia a partir del análisis de los datos sanitarios de cada zona.

Planes locales

Otra de las actuaciones previstas consiste en la elaboración de planes locales de salud, que deberán estar finalizados antes del 15 de diciembre. Se empezará por 14 ambulatorios de toda Galicia donde se “ensayarán fórmulas de gestión” y se definirán sistemas de cobertura de ausencias. La intención de Sanidade es “desarrollar al máximo las potencialidades y roles de categorías como enfermería, farmacia o personal de gestión y servicios”.

A modo de ejemplo, las enfermeras podrán encargarse de controlar a los pacientes con Sintrom. “Aunque ya lo estamos haciendo en algún caso, está bien que se generalice”, explica la responsable de Satse Galicia, Malules Carbajo.

Según explica la responsable de CIG Saúde, María Xosé Abuín, se definirán las “carteras de servicio” de enfermería, farmacia y personal de gestión de manera que quedarán identificadas las competencias de cada uno. ¿Y qué ventajas tendrá esto? “El paciente sabrá, en función de lo que necesite a quien debe acudir y podrá pedir cita directamente con ese profesional”, explica.

Las enfermeras reclaman, en todo caso, que se establezcan protocolos “garantistas”. “Si vamos a controlar a enfermos crónicos, por ejemplo, tenemos que saber en qué punto tenemos que derivar el paciente al médico”, explica Malules Carbajo.

Reclamaciones

Los médicos, por su parte, ponen en cuestión esta ampliación de funciones a las enfermeras. “No me gustaría encontrarme en su pellejo, pueden acabar con reclamaciones del paciente si le pasa algo”, explica el vicepresidente del Colegio de Médicos de Pontevedra, Manuel Rodríguez Piñeiro.

Pero el incremento del protagonismo de las enfermeras en Atención Primaria choca además con otro problema: el déficit que existe de este tipo de profesionales en el Sergas. “Debería haber dos enfermeras por cada médico, pero lo que tenemos es media enfermera por cada facultativo”, explica la responsable de Satse.

Rodríguez Piñeiro concuerda con el diagnóstico de que lo que hace falta es más personal. “La única solución es incrementar de forma notable el número de médicos. Esto supone crear más plazas y destinar más dinero. Pero no quieren gastar porque la sanidad es el patito feo”, censura. Aunque los colegios médicos ya no acuden a las reuniones del Consello de Atención Primaria por considerarlas “poco útiles”, sí hubo representación del sindicato O’mega, del que forma parte Rodríguez Piñeiro.

Jubilaciones

Desde CIG-Saúde se suman a esta reivindicación y reclaman un plan de ordenación de recursos humanos. Avisan que el problema se agravará en el futuro porque habrá “más jubilaciones” y se complicará la formación de MIR porque facultativos que además son tutores de residentes están a punto de retirarse.

Por el Sergas acudió a la reunión el gerente, José Flores, la directora xeral de Planificación e Reforma Sanitaria, Estrella López-Pardo, la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, y el director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal. Los responsables de la Consellería de Sanidade informaron además a los representantes de Atención Primaria de las medidas adoptadas por la Xunta para reducir la carga en los centros de salud derivada del COVID como la posibilidad de que las farmacias expidan los certificados de vacunación o los autotest de diagnóstico, así como la apertura de puntos de atención administrativa en distintas ciudades y villas de Galicia.

Caballero

El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, participó ayer en una concentración para defender la sanidad pública celebrada en Sanxenxo, desde donde exigió a la Xunta de Galicia una mayor inversión para acabar con las listas de espera en atención primaria.

“Es necesario sacar a lo largo de esta legislatura 5.000 plazas estables para profesionales sanitarios para cubrir bajas y jubilaciones, para tener una atención primaria de primera y para impedir que sigan existiendo listas de espera, lo cual es un atentado contra los derechos sanitarios de los gallegos y las gallegas”, defendió el socialista.