A estas alturas, la comunidad educativa no sabe con exactitud cómo será la vuelta a las aulas. La ministra de Educación, Isabel Celaá, aseguraba ayer que no se retirará ninguna de las medidas establecidas a mediados de mayo, como mascarilla o distancias de seguridad de 1,2 metros, pero añade que a “finales de agosto” se reunirá con las comunidades para “actualizar” las circunstancias y “fijar las condiciones del nuevo curso”. “No somos partidarios ahora de retirar ninguna de las medidas que nos han permitido transitar todo el curso con los centros abiertos”, indicó.

La ministra señaló que su departamento trabaja con los datos de los que dispone en estos momentos, por lo que por ahora no se modificarán las medidas. Sin embargo, dijo que a “finales de agosto” se reunirá de nuevo con las comunidades para “actualizar las circunstancias y medidas higiénico-sanitarias” y así “fijar las condiciones del nuevo curso”.

Repetir curso

Por otro lado, el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, apostó por no hacer repetir curso a los alumnos solo en base a criterios de suspensos y aprobados porque, a su juicio, “la repetición no soluciona nada” y “es el mejor indicador de fracaso escolar”.

Preguntado por la polémica generada por el proyecto que el Ministerio de Educación envió a las comunidades hace unas semanas –en el que se regulaba la evaluación y la promoción de curso no bajo criterios de suspensos, sino tomando la decisión como “medida excepcional” por el equipo docente–, Tiana indicó que los que han sido docentes saben “de la dificultad que tiene tratar con repetidores” y mostró su confianza en la “profesionalidad de los profesores” para aplicar estas medidas. “No se está regalando nada” a quienes pasen de curso con suspensos, incidió.