La victoria del Estado sobre los Franco para recuperar el pazo de Meirás comienza a derivar en una crisis política en el seno del Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos, a tenor de la negativa de la Abogacía del Estado a recurrir un fallo que exime de “mala fe” a los herederos del dictador y establece que reciban dinero para cubrir las reformas y gastos de mantenimiento del inmueble desde 1978. Una de las partes del propio Ejecutivo tachó ayer de “terrible equivocación” esa decisión, mientras el líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, reiteró su oposición al pago a los Franco.

Podemos e Izquierda Unida presionaron ayer mediante un comunicado a la Abogacía del Estado para “rectificar de inmediato”. Sus respectivos responsables de Memoria Democrática, Paco Gracia y Esther López Barceló, respectivamente, pidieron luchar jurídicamente contra la indemnización, que según avanzó esta semana el abogado de los Franco será sensiblemente superior a los 800.000 euros.

“No se puede sentar ningún peligroso precedente que obligue no solo ahora, sino en el futuro por otros casos aún en disputa, a destinar centenares de miles de euros para pagar a la misma familia del dictador que se ha aprovechado durante décadas de bienes públicos y que sigue aferrándose a ellos con uñas y dientes”, alertaron las formaciones que gobiernan coaligadas con el PSOE.

“Los Franco nunca compraron el pazo de Meirás con su dinero. Pagarles ahora sería hacer pagar a la ciudadanía dos veces y repetir la injusticia”, declaró Gracia.

A esta cuestión se refirió el delegado del Gobierno en Galicia. Javier Losada explicó que la decisión de la Abogacía del Estado se basa en que el fallo es “técnicamente favorable a los intereses del Estado”. Según fuentes del Ejecutivo citadas por Efe, la negativa a recurrir se ciñe a criterios “estrictamente jurídicos”.

Aun así, el disenso no solo afecta a Unidas Podemos, sino a relevantes voces del PSOE. Su líder en Galicia, Gonzalo Caballero, rechazó que el erario público pague “un solo euro” a los Franco y el concello de A Coruña, que dirige la socialista Inés Rey, estudiará la opción de recurrir, vía que ya ha anunciado que seguirá Sada.