Selectividad está cada vez más cerca (8, 9 y 10 de junio) y la CiUG ya ha puesto a funcionar la maquinaria para abordar el examen, “previendo que en Galicia se darán las condiciones para realizar esa prueba de forma presencial”. No escatimarán en medidas de seguridad. De hecho, van en la línea del pasado año, aunque en algunos aspectos se intensifican, como en la ventilación en las aulas donde se realicen los exámenes, de preferencia continua. Además, se especifican medidas para los aspirantes que presenten síntomas mientras tiene lugar la realización de la prueba o para quienes no pueden llevar mascarilla. La mascarilla será la regla general, obligatoria, dado que no siempre se podrá mantener la distancia.

Por eso repetirá el despliegue del pasado año en comisiones delegadas, es decir, en lugares en los que se hará la prueba. Se trabajará con la premisa de ocupar una cuarta parte de la capacidad total disponible en cada estancia, dejando tres asientos libres entre alumnos, hasta un tope de 50 jóvenes por aula, y los estudiantes, como norma “general”, mantendrán el mismo puesto en todos los exámenes de la prueba. Esta vez las sedes serán las facultades y escuelas universitarias de los campus y solo se saldrá de ese esquema en los casos de las comisiones periféricas (Cee, Viveiro y A Rúa).

Asimismo, la organización mantiene la distribución de los exámenes por días y horas de 2020 para “evitar la coincidencia de todas las materias comunes el primer día de la prueba” y la aglomeración del alumnado. El evitar agrupaciones es una de las consignas. Al centro donde se celebre la prueba solo podrá acceder la comisión, alumnado, docentes y acompañantes de alumnos que precisen asistencia.

En cuanto a ventilación, los vocales deben mantener las ventanas abiertas “entre y durante los exámenes”. También se recomienda abrir la puerta o puertas “cuando sea posible”. Si no puede ventilarse de forma constante, al menos toca 15 minutos al principio y entre 2 y 5 minutos en intervalos de 15-20 minutos durante la prueba y 15 al final cuando los alumnos salgan.

La CiUG insistirá en la obligación de uso de la mascarilla tanto para el personal que colabora como para los aspirantes, y tanto en el aula como fuera. Además de gel (recomendable) y mascarilla, documentación, resguardo de matrícula y pago, bolígrafo azul o negro, los diccionarios y calculadoras autorizadas, los alumnos pueden llevar pañuelos de papel, agua sin etiqueta y mochila con sus pertenencias, incluida comida y bebida, la vista. No puede entrar al aula de examen con dispositivos electrónicos activados..

Los alumnos que estén en aislamiento por COVID y no puedan concurrir en junio, acreditándolo, podrán ir a julio. A todos los efectos contarán como de la convocatoria ordinaria. Si un alumno muestra síntomas de contagio del COVID en la prueba, “será llevado a una sala o aula donde pueda estar acompañado solo del representante del centro”, con mascarilla y distancia. Por otro lado, de forma general, no se autorizan las pantallas protectoras. “Si un alumno estuviese legalmente exento” de usar mascarilla, debe comunicarlo en la presentación con la acreditación pertinente y en ese caso “podrá emplear pantalla y/o podrá hacer los exámenes a mayor distancia interpersonal en el aula que le corresponde o, si fuera preciso, en una estancia aparte”.