Medio Rural reformará 2.000 casas en aldeas con acceso a servicios digitales

La Xunta planea rehabilitar 2.000 casas en 200 núcleos rurales y convertirlas en “aldeas inteligentes” dotadas de herramientas tecnológicas y soluciones innovadoras que les faciliten el acceso a determinados servicios. La idea del Gobierno gallego es repoblar el rural y para ello impulsará la recuperación de 18.000 hectáreas de tierras abandonadas que se destinarán a la producción de cereal y al cultivo de lino que servirá de materia primera para la futura fábrica de fibras textiles prevista por el Ejecutivo de Núñez Feijóo. Esta actividad económica permitirá, según la Xunta, un “crecimiento demográfico” en el medio rural para el que será necesario recuperar viviendas en este entorno.

La Consellería de Medio Rural actuará sobre edificaciones que son propiedad de la Administración autonómica o que están en manos de los concellos, pero también contempla la posibilidad de comprar casas a particulares para reformarlas. La rehabilitación la llevaría a cabo la propia Xunta en solitario o en colaboración con los ayuntamientos. También se estudia la opción de destinar parte de los fondos europeos captados a ayudas a particulares para que mejoren sus inmuebles.

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Las casas se rehabilitarán respetando las edificaciones tradicionales pero aplicando “criterios bioclimáticos, de eficiencia energética e integración paisajística”. Y además incluirán aplicaciones TIC para el aprovisionamiento de “e-servicios”, es decir, tendrán conectividad a internet que facilitará, por ejemplo, la atención sanitaria en el domicilio o la implantación de sistemas de teleasistencia.

Ésta es una de las actuaciones que forman parte del nuevo Polo de Transformación Industrial y que la Xunta ha trasladado al Gobierno para optar a fondos europeos. Se han seleccionado un total de ocho proyectos “tractores”, en el que están implicadas 30 empresas y centros tecnológicos gallegos, y que movilizarán 3.000 millones de euros además de permitir la creación de 30.000 empleos. Para gestionar estas iniciativas se constituirá una sociedad mercantil en la que participará la Xunta y las empresas y a la que además se invitará a las entidades financieras para que también aporten capital.

“Esto es una oportunidad de negocio, una oportunidad medioambiental, una oportunidad laboral y una oportunidad social”, explicó ayer el presidente autonómico, Alberto Núñez Feijóo, tras el Consello de la Xunta. El vicepresidente segundo y conselleiro de Economía, Francisco Conde, explicó que la sociedad mercantil permitirá además “dar mayor velocidad y capacidad de tracción a los proyectos”.

Entre las iniciativas que optan a fondos europeos se incluye una planta de gestión de biorresiduos, entre los que se incluyen purines, desechos marinos o textiles, y que tendrá capacidad para tratar 2,6 millones de toneladas al año.

Se propone también una planta de hidrógeno verde que podría situarse en As Pontes y una fábrica de fibras textiles a partir de viscosa con una capacidad de hasta 200.000 toneladas anuales. De forma paralela, se ampliará la potencia renovable (eólica y solar) para que estos proyectos se puedan autoabastecer energéticamente.

Estas iniciativas se complementarán con la creación de “cadenas logísticas sostenibles” como la puesta en marcha de una flota de 150 camiones y autobuses para el transporte de mercancías y pasajeros que den servicio a las actividades económicas financiadas con fondos europeos. Estos vehículos estarán propulsados por biocombustibles (por ejemplo, pila de hidrógeno o biometano).

También se creará una red de centros de innovación que se centrarán en “la gestión de residuos, el impulso de la economía circular, la gestión sostenible de los recurso naturales, la promoción de energías renovables...”. Y, por último, la Xunta propone implantar laboratorios digitales que desarrollen nuevas capacidades digitales y soluciones de software.