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“El gorrión está en el nido”, la frase que permitió llegar al piloto del narcosubmarino

La jueza de Cangas cita el 23 de diciembre a los 7 procesados y pide 164 millones de fianza

“El gorrión está en el nido”. Así avisaba Iago Serantes a Enrique Carlos Serantes Giráldez el 27 de noviembre del año pasado de que Agustín Álvarez, el piloto del narcosubmarino hundido con casi 3.000 kilos de cocaína en Aldán y buscado en aquel momento por las fuerza policiales, se encontraba escondido en la casa de Punta Couso esperando ayuda. Las fuerzas antidroga tenían pinchados los teléfonos y así obtuvieron su localización.

La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Cangas ha concluido la investigación del alijo del semisumergible y procesa a los tres tripulantes que cruzaron el Atlántico con la droga: el vigués Agustín Martínez y los ecuatorianos Luis Tomás Benítez y Pedro Roberto Delgado. También a los cuatro detenidos en tierra: Iago Serantes, Iago Rego, Enrique Serantes y Rodrigo Hermida. Les imputa un delito contra la salud pública cometido en el seno de una organización de narcotráfico.

Dado que la causa se tramitará como sumario al conllevar penas de más de 9 años de prisión, la jueza de Cangas cita para el próximo día 23 de diciembre a los siete procesados para la declaración indagatoria. Las comparecencias serán a través de videoconferencias con la cárcel de A Lama donde siguen en prisión provisional los tres tripulantes del semisumergible, con los juzgados de Palma, ciudad de residencia de Iago Serantes y con los de Lleida, donde vive Iago Rego. Enrique Serantes y Rodrigo Hermida declararán en el juzgado de O Morrazo.

La jueza mantiene en prisión a los tres tripulantes del narcosubmarino y ratifica la libertad provisional del resto de procesados. A los siete les requiere para que presten fianza en la cuantía de 164.326.097 euros para asegurar las eventuales responsabilidades pecuniarias. Si no lo hacen, ordena que se proceda al embargo, depósito y tasación de sus bienes en cantidad suficiente para cubrir dicha suma. O, en su caso, pide que se acredite su insolvencia documentalmente, extremo por el que optarán todos ellos ante la imposibilidad de hacer frente a la millonaria fianza.

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