La crisis política ourensana sumó ayer otro capítulo a la saga, aunque varió el escenario: del concello de la ciudad de As Burgas a la diputación provincial. El presidente de la institución y líder de los populares en la provincia, José Manuel Baltar, cesó a su vicepresidente segundo , Miguel Caride, el líder de los concejales díscolos con el alcalde Gonzalo Pérez Jácome ante un posible caso de transfuguismo, que analiza el Juzgado de primera instancia número 1 de Ourense. Ante la imposición de medidas cautelares, Baltar ha preferido cortar la relación con Caride de momento, si bien no cubrirá la vacante.

El conflicto nace de la guerra interna en Democracia Ourensana, el partido liderado por Pérez Jácome, que llegó a la Alcaldía el año pasado gracias a un pacto con el PP a cambios de blindar la presidencia de Baltar en la diputación y no disputar las elecciones autonómicas disputadas el 12 de julio.

Las filas de DO estallaron hace unos meses. De los siete ediles, dos apoyan a Jácome y los otros han impulsado un investigación judicial sobre posibles corruptelas por parte del primero y han sido considerados tránsfugas por su partido. Tras esta crisis, el PP suspendió el pacto con Jácome.

Un informe del secretario xeral de la institución provincial fue alegado ayer por la diputación como motivo del cese de Caride. El funcionario alerta de que el abandono de un grupo político por otro no permite beneficiarse mediante la obtención de cargos o mejores sueldos, por lo que Baltar optó por el cese. No reveló si lo nombrará para el cargo una vez se resuelta la situación judicial derivada del recurso de Caride y tres de díscolos más de DO contra los acuerdos del partido que los consideraban tránsfugas.

Tras abandonar el grupo de DO, Caride no solo fue nombrado vicepresidente segundo de la diputación, sino que accedió a la junta de gobierno y asumió las competencias en Dinamización do Medio Rural y Teatro Principal y Centro Cultural Provincial Marcos Valcárcel. Renunció al salario vinculado al cargo y solo recibía las dietas.

Tras el anuncio de la diputación, el regidor de la ciudad de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, la vinculó con la condición de “tránsfuga” de Caride. “Miguel Caride, cesado hoy como vicepresidente de la diputación, por transfuguismo”, escribió en sus redes sociales.

Caride, por su parte, negó que la decisión lo “pillase por sorpresa”, pues “ha lo había hablado con el presidente”. “No hay ningún tipo de problema”, declaró ayer, informa Europa Press.

Eso sí, ahora moverá ficha y solicitará en el concello un informe sobre la condición de Telmo Ucha, edil no adscrito, pero uno de los dos fieles que le quedan a Jácome. Entró al concello tras la dimisión de un díscolo y Caride pide aplicarle el mismo criterio que a él para que cese: si un no adscrito como él no puede tener cargos, Ucha tampoco, alega.

De no poder seguir ejerciendo su papel en las juntas de gobierno, “habría un grave problema”, alertó, pues estas reuniones carecerían de quórum –son necesarios tres ediles– y se multiplicaría la debilidad política de Jácome.