El Parlamento aprobó ayer por unanimidad instar a la Xunta a solicitar al Estado la ejecución provisional de la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña que obliga a los herederos del dictador Francisco Franco a devolver el pazo de Meirás y que sea la administración autonómica la que asuma la gestión. El debate, en el seno de la comisión de justicia y a instancias de una proposición del BNG, coincide con la presentación por parte de los herederos del militar golpista de un recurso contra un fallo, que consideran "notoriamente parcial, sesgado y tendencioso".

A petición del BNG, todos los grupos con representación en el Parlamento reconocieron ayer la labor desarrollada por las personas y asociaciones que denunciaron el "expolio" y trabajaron en la recuperación para el patrimonio público de As Torres. PP, BNG y PSOE estuvieron también de acuerdo en solicitar al Estado que pida la ejecución provisional de la sentencia que considera probado que Franco se valió de un negocio simulado para hacerse con la titularidad de este inmueble, adquirido mediante cuestaciones en muchos casos forzosas, aportaciones de las administraciones y detracciones en nóminas de los trabajadores, y que fue mantenido con fondos públicos durante toda la dictadura.

Los tres partidos se refirieron a los Franco como "okupas". Los más duros, el nacionalista Luís Bará y la socialista Paloma Castro, denunciaron en sus respectivas intervenciones la "corrupción" y la "impunidad" del franquismo y celebraron una sentencia "histórica" que supone una "pequeña reparación". El PP, en su turno, quiso dejar clara también su oposición a los Franco. "No simpatizamos con ningún tipo de okupas", terció José Alberto Pazos.

El PP se opuso, con todo, a otra de las peticiones del BNG, dirigida a impedir que la Fundación Nacional Francisco Franco siga gestionando las visitas a este Bien de Interés Cultural y a consensuar con la Diputación de A Coruña y el concello de Sada el contenido de los itinerarios para recoger "toda la historia" de este inmueble. Luís Bará lamentó que aún a día de hoy la fundación utilice As Torres para hacer "apología del franquismo".

El PP se mostró de acuerdo con establecer conjuntamente el contenido de los itinerarios, pero sostuvo que, como paso previo, es preciso disponer del permiso para la gestión del pazo. El popular Alberto Pazos anunció que su partido acaba de presentar una proposición no de ley para solicitar al Gobierno que ceda a la Xunta la gestión de As Torres. Sobre la gestión de las visitas por parte de la Fundación Franco, el PP replicó que, para actuar, antes debe de ser ilegalizada.

Por su parte, los Franco, en su prolijo recurso de 140 páginas, ponen especial empeño en desmontar el relato de hechos históricos probados y en intentar invalidar el testimonio de los peritos solicitados por la Abogacía del Estado. Los Franco ponen tachas a todos, pero centran especialmente sus dardos contra Carlos Babío y Manuel Pérez Lorenzo, autores de Meirás, un pazo, un caudillo, un espolio. Quieren invalidar su testimonio por su perfil "antifranquista".