Uno de los deberes que puso la Consellería de Educación a todos sus centros es que llegaran a la vuelta a clase con un plan B, un plan alternativo, de contingencia, en el que debían fijar las medidas que se tomarían en caso de suspensión de la actividad lectiva y para hacer efectiva la enseñanza a distancia. Pero estas previsiones deberán actualizarse e incorporar el plan específico para el caso hipotético de curentenas de larga duración en el que comenzará a trabajar, según lo acordado ayer, el Comité Educativo.

Ese plan incluirá las medidas que sería preciso aplicar en el supuesto de que se deba pasar a una situación de cuarentena de larga duración, tanto si esta se produce a nivel general como si es por zonas. El conselleiro, Román Rodríguez, no obstante, incide en que ese cierre"no es un escenario que se contemple en este momento". No obstante, cree que hay que estar preprados y el plan recogerá los recursos pedagógicos y tecnológicos a los que habría que recurrir para tener instrucciones "precisas e inmediatas" sobre cuestiones como el seguimiento de la actividad lectiva o cómo sería la evaluación.

Por otro lado, el comité clínico ya tiene en su poder el Protocolo Complementario de Actividades Extraescolares en los centros eudcativos que permitirán su desrarollo "siempre y cuando se cumplan las normas dictadas por las autoridades".