Los grupos parlamentarios que conforman la oposición no se han quedado al margen de la decisión de Educación de aplazar una semana el inicio de curso para los chavales de la ESO, Bachillerato y FP. Sin ir más lejos, para el BNG esto constata el "caos" organizativo y la "improvisación", así como que "la Xunta tuvo seis meses de oro que fueron perdidos". Por su parte, el PSdeG la medida supone el "reconocimiento" por parte del Gobierno gallego del "fracaso" de la planificación de la vuelta a las aulas.

Para el diputado nacionalista Manuel Lourenzo, la Xunta "perdió seis meses, haciendo propaganda y echando balones fuera" que deberían haber servido para diseñar un protocolo seguro para el reinicio de la actividad lectiva.

En opinión de Lourenzo, todo ello ha derivado en el "caos" que atraviesan los centros, que desconocen "cuánto profesorado" van a tener o las medidas de seguridad que deben implantar. En cuanto a la semipresencialidad que propone la consellería de Román Rodríguez, demanda detalles: "No se sabe si va a haber horarios, medios o profesorado". "Ni las familias ni los equipos directivos deben ser responsables de los bandazos y la improvisación del PP", insistió.

Por su parte, el parlamentario socialista Pablo Aragüena cree que "plegarse" ante las demandas de los directores de los institutos supone "un reconocimiento de su fracaso". "Improvisación, chapuza, dejadez, negligencia... se acaban los adjetivos y sustantivos". Así ha calificado el diputado la gestión de la Administración a la hora de planificar la vuelta a las aulas. "La prueba más evidente de que no hay nadie al volante es el cese de la cúpula de la consellería", añadió.

Por su parte, el secretario general del PPdeG, Miguel Tellado, ha defendido la decisión de la Xunt como "acertada", además de "prudente, dialogada y consensuada" con la comunidad educativa.