"La historia de nuestro país está repleta de momentos de enorme dureza y dificultad, pero probablemente nunca estuvo ante una incertidumbre como la de ahora". De esa forma alertó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de la dimensión de la crisis causada por la pandemia de Covid-19, que ya ha causado un desplome económico sin precedentes desde la Guerra Civil y amenaza con colapsar las cuentas públicas y el desempleo. Por ello, fijó ayer como absoluta prioridad "hacer frente a la pandemia", reforzando la acción económica "para que los esfuerzos coordinados" de la administración "se dirijan a sostener el Estado del Bienestar".

Su advertencia se produjo el mismo día en que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reconoció un problema de recaudación de impuestos y, por tanto, de ingresos para hacer frente a las prestaciones de desempleo, las pensiones, los ERTE, los salarios públicos...

Feijóo insistió en la necesidad de prepararse para un escenario complejo durante la toma de posesión de su nuevo gobierno, en el que introduce cambios relevantes. Releva a los titulares de Sanidade y Educación -cuyas competencias se integran de nuevo con Cultura y Universidades-, crea la Consellería de Emprego e Igualdade y constituye una Vicepresidencia Segunda de carácter económico que asume el titular de Economía, Francisco Conde.

Ese organigrama, prosiguió Feijóo, responde precisamente a las necesidades de esta coyuntura, que requieren una supervicepresidencia que coordine las actuaciones en los ámbitos productivos, laborales y económico, por lo que Conde supervisará actuaciones de Medio Rural, Emprego, Medio Ambiente o Infraestruturas.

En un acto condicionado por las medidas de seguridad para prevenir contagios de Covid-19, el titular de la Xunta, que inicia su cuarto mandato consecutivo igualando a Manuel Fraga, advirtió a los suyos. "Ser conselleiro no es un premio, es un mandato", indicó antes de pedirles a los once miembros del Consello que trabajen "a destajo" para mitigar los efectos de lo que prevé una hecatombe socioeconómica. De momento, en el trimestre posterior al decreto del estado de alarma, los hogares con dificultades para llegar a fin de mes aumentaron en 73.227 hasta un total de 589.000, más de la mitad de los existentes en Galicia, según el Instituto Galego de Estatística (IGE).

"Esta no es una toma de posesión al uso porque este Gobierno no tiene 100 días. Los problemas están encima de la mesa y ahora nos convocamos a tener la primera reunión del Gobierno. Todos tenemos tareas pendientes", expuso sobre la urgencia de las medidas a tomar, asegurando, además, que los "primeros meses de la legislatura" serán los más decisivos.

En este terreno, la Xunta tiene por delante el reto de sacar adelante sus presupuestos para 2021. Aunque cuenta con mayoría absoluta para aprobarlos en la Cámara, carece todavía de información del Gobierno central sobre los recursos de que dispondrá o sobre el techo de gasto, lo que condiciona su elaboración.