"Esperamos contra toda esperanza". El secretario xeral de los socialistas gallegos. Gonzalo Caballero, concluía con palabras de Ricardo Carvalho Calero, homenajeado este año en las Letras Galegas, su primera intervención en el debate de investidura de ayer para defender que su formación está "dispuesta a contribuir" y a "trabajar por Galicia" como le piden los gallegos en una legislatura que, conmina, debe ser "la de protección de las personas". Para ello considera que "no hay mejor forma que aplicar las amplias competencias que el Estatuto le da al Gobierno" que presidirá Alberto Núñez Feijóo cuatro años más tras ser refrendado ayer por la mayoría de la Cámara.

"La prioridad de la política social va a ser la línea roja del PSdeG. No puede haber más retrocesos", advirtió Caballero, quien, no obstante, concedió que, si en algún momento de la legislatura la crisis económica y social que ha disparado la pandemia está "suficientemente despejada", los socialistas están dispuestos a "hablar de la reforma" del Estatuto de Autonomía de Galicia, volumen que acompañó a Caballero durante su intervención, para tener un "diseño institucional más eficiente para hacer buenas políticas publicas". Feijóo respondió que, si bien no es la principal "preocupación" de Galicia, tiene "todo el interés" para conocer la "sensibilidad" del PSdeG actual sobre el asunto.

Caballero, quien presentó su formación como "alternativa a las políticas del PP" y la erigió en defensora de lo público frente a los que apuestan por lo privado, incidió en que esta debe ser la legislatura de "protección de las personas" e instó a "construir un cinturón de protección para la gente que evite que alguien pueda quedar atrás" en la salida de esta crisis sanitaria, económica y social. Para lograrlo, tendió la mano al nuevo mandatario, si bien avisó de que las medidas para salir de la crisis de 2009, basadas en la "austeridad" y en la ortodoxia, no valen y que, de hecho, la UE está pasando "página" a esos paradigmas. Al respecto, Feijóo le respondió que los sucesivos resultados electorales de su partido apuntan a que a los gallegos "les gustó cómo" salió su gobierno de aquella coyuntura económica.

Sin embargo, para Caballero, Galicia "no es la Arcadia feliz" que dibujan los populares, sino que después de once años en el gobierno lo que ve es pérdida de población o un tejido productivo "más débil" tras "recortes", "precarización de empleos" o "desmantelamiento de tantos servicios". Frente a ello contrapuso un "nuevo enfoque" donde "las políticas sociales son fundamentales" y ofertó la mano de un PSdeG que va a poner "lo mejor" de sí mismo en cuatro ejes de avance que insta al PP a liderar, entre ellos la "defensa de lo social" o una "reconstrucción económica del país" tras cuestionar que el Ejecutivo carece de proyecto económico para la comunidad. Añadió, además: "Es hora de un gran acuerdo para la regeneración y para la calidad institucional de Galicia". En ese capítulo conminó a Feijóo a comparecer al menos una vez al mes ante el Parlamento para dar cuentas de su gestión mientras se prolongue la situación de pandemia.

Con todo, consideró que el "mejor acuerdo" debe ser en torno a la defensa del autogobierno. "La Xunta tiene que ejercer sus competencias", recalcó, y se preguntó, por ejemplo, para qué sirve una Consellería de Economía que "no toma medidas para el tejido productivo" o una de Educación "que no toma medidas para el inicio del curso".

En ámbitos concretos, Caballero reclamó a Feijóo que retome uno de los anuncios que, aseguró, realizó en la campaña, cuando habló de crear 15.000 empleos públicos, y le instó a impulsar 5.000 plazas estables para profesionales sanitarios o a que acepte "hoy mismo" una comisión de investigación sobre lo ocurrido en las residencias de mayores en la primera oleada del coronavirus con el objetivo de poder aprender de los "errores" y de "construir un mejor modelo" para su gestión.

También animó al mandatario gallego a apostar por el feminismo y a traducir esa apuesta en una consellería específica y a asegurarse de que las primeras matrículas en los campus sean gratuitas para todos los estudiantes de la comunidad. En relación a la enseñanza superior, reclamó a Feijóo un "claro compromiso" con el sistema universitario gallego público y le instó a no tomar medidas que lo "amenacen" y a trabajar con los rectores para abordar cualquier cambio en el mapa de titulaciones o la creación de nuevas universidades.

Caballero enfatizó, con todo, que ahora la "prioridad" es dar respuesta ante la crisis económica, social y sanitaria y recalcó que Feijóo tiene "la mano tendida" de su partido desde una oposición "crítica".