Las apelaciones al diálogo y la unidad jalonan los diarios de sesiones del Parlamento gallego durante los años más duro de la crisis financiera desatada a finales del año 2008. Ahora, toca nueva recesión a la vista.

La oposición gallega avanzó ayer disposición al acuerdo con el PP antes de que hoy comience la sesión de investidura, pero matizó que no avalará medidas similares a las de hace años, cuando la austeridad se plasmo en recortes de gasto público.

"Es el momento de grandes acuerdos de país y queremos decirle al PP que el PSdeG, desde una oposición firme, contundente, pero leal con el país, tiende la mano", declaró ayer el líder socialista Gonzalo Caballero, que rechazó "más recortes" esta legislatura.

La nacionalista Olalla Rodil insistió en el mismo argumento, rehuyendo las "recetas de siempre" de contención del gasto.

Por su parte, Pedro Puy (PP) reiteró su disposición al acuerdo, pero recordó a sus rivales el aval de las urnas a sus medidas y programa.