Estamos en un momento de cambio acelerado por el Covid-19, y hay que incentivarla, ya que una de las claves de futuro es la transformación digital e innovadora del sector agroalimentario y del medio rural, a través de la agricultura inteligente, la industria agroalimentaria 4.0, la bioeconomía y los territorios rurales inteligentes. Por ello es importante acompañar a los agricultores y ganaderos en el cambio, especialmente a las pequeñas y medianas explotaciones, por sus mayores dificultades para acometer inversiones y adoptar innovaciones. Todos estos objetivos deben lograrse mediante la modernización del sector, el fomento del conocimiento y el impulso de la innovación y la digitalización de manera que las explotaciones agrícolas y rurales desarrollen su potencialidad.