El Gobierno central dio ayer un nuevo portazo a la reclamación autonómica de 2.500 millones de euros, de los que 200 corresponden a Galicia, correspondientes al mes de diciembre de 2017, que un cambio de método contable de la administración de Mariano Rajoy impidió pagar y que el actual Ejecutivo se niega a abonar, pese a prometer que sí lo había. La ministra de Hacienda, María José Montero, consideró que esa deuda "se ha compensado con creces" mediante el fondo de 16.000 millones destinados a las autonomías para afrontar la crisis ocasionada por la pandemia de coronavirus.

Montero zanjó la cuestión en respuesta al senador de JxCat Josep Luis Cleries en un debate en la Cámara Alta. Esa deuda fue un caballo de batalla autonómica .

El presidente del Ejecutivo autonómico, Alberto Núñez Feijóo, llegó a asegurar que su administración se arriesgaba a aplicar recortes sin esos fondos, aunque finalmente cubrió con préstamos el agujero creado.

En febrero, el Gobierno central logró aprobar en febrero en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) gracias a los votos de las comunidades socialistas una solución para compensar a las autonomías por esa deuda del IVA. Esta consistió en permitir que su déficit llegue al 0,2% este año, dos décimas por encima de la meta inicial.