La Xunta ha ordenado el cierre cautelar de las viviendas comunitarias Burón I y II y el traslado de todas las personas mayores que residían en esas instalaciones, ubicadas en el municipio lucense de A Fonsagrada, después de la inspección motivada por un informe que fue remitido por los servicios sociales municipales a raíz de la existencia de supuestos malos tratos en la residencia.

Los servicios sociales del Ayuntamiento de A Fonsagrada remitieron un informe a la Fiscalía y a la Xunta para alertar sobre la existencia de supuestos malos tratos en una residencia privada de ese municipio lucense, después de la denuncia que realizó una persona de forma "anónima", acompañada "de material fotográfico".

Después de esa denuncia, inspectores de la Xunta, acompañados por agentes de la Guardia Civil, que acudieron para prestar apoyo, realizaron ayer por la noche una inspección que se prolongó "durante varias horas".

Fuentes de Política Social consultadas por EFE confirmaron que, al ver el estado en el que se encontraban los 29 residentes, se tomó la decisión de clausurar de forma inmediata las instalaciones y de reubicar a todos los ancianos. Ayer se trasladaron al Hospital de Lugo para ser sometidas a una revisión médica.