Los alcaldes como capital político. Con esta premisa, los líderes del PSdeG y del Bloque se reunieron ayer con regidores y responsables municipales para poner en valor la gestión local como baluarte del "buen hacer" que protagonizarían en caso de llegar a la presidencia de la Xunta. Gonzalo Caballero se reunió con los suyos en Redondela, donde mantuvo un encuentro con los alcaldes de la provincia. Y Ana Pontón hizo lo mismo en Santiago, con representantes locales de toda Galicia.

Arropado, entre otros por Abel Caballero, Carmela Silva o David Regades, el candidato socialista a la Xunta llamó a "pasar página de la política de tensión y de confrontación" que, a su juicio, ha supuesto la etapa de Feijóo para iniciar un nuevo periodo de "cooperación y colaboración" con los concellos, a los que se debe dotar de más fondos para hacer frente a las competencias que asuman, que ponga fin a la "falta de sensibilidad social y nula capacidad de diálogo" mostrada por el Gobierno gallego con el PP al frente.

"Necesitamos un gobierno progresista al frente de la Xunta para que los ayuntamientos tengan un aliado para trabajar en favor de los vecinos", indicó Gonzalo Caballero en Redondela. Su objetivo es alcanzar un ejecutivo autonómico socialista al igual que ya rigen en tres diputaciones y más de un centenar de municipios que llevan a que el 55% de la población de Galicia esté bajo el mando local del PSOE.

Caballero dio por iniciada una nueva fase en la precampaña con estos contactos con los principales alcaldes socialistas de la comunidad para poner el acento en el "giro histórico" que pueden suponer las próximas elecciones. Empezó por la provincia de Pontevedra, cuya candidatura electoral encabeza, y su intención es repetir el mismo formato en las otras tres.

Criticó que en los once años de gobiernos de Feijóo el escenario municipal le ha sido "ajeno" porque le resulta "incómodo", dado que los alcaldes, dijo, "tienen un nivel de proximidad que él no consigue en el conjunto de Galicia".

En la misma línea, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, incidió en la importancia de que "toda la iniciativa y la tensión política marche en la misma dirección". "Gobernar ayuntamientos, diputación, Xunta y Gobierno es lo que mejor que le puede pasar" a los municipios de la provincia de Pontevedra, proclamó el regidor vigués.

En un acto posterior en Ourense, el secretario xeral del PSdeG censuró las "faltas de respeto" del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, hacia los representantes de la oposición en el último pleno municipal y reclamó al PP retirar su apoyo al partido gobernante, Democracia Ourensana. "Ourense no puede estar en este nivel de política de crispación e insultos propios de una república bananera", avisó sobre los chistes vejatorios del regidor contra los representantes municipales de la oposición.

Por su parte, la candidata del Bloque a la Xunta, Ana Pontón, puso la experiencia y el capital acumulados en sus ayuntamientos como aval de que el BNG está preparado para liderar el gobierno gallego. Con esta reunión de ayer, los nacionalistas pusieron en marcha su maquinaria municipal para el 5 de abril.

Ana Pontón, que exhibió su "orgullo" por poder comparecer "rodeada" de alcaldes y alcaldesas y representantes municipales, tomó el "ejemplo de los ayuntamientos transformadores e innovadores" para poner en valor el potencial del BNG y la "fortaleza" que esta formación presenta a las elecciones autonómicas.

La líder nacionalista subrayó que se presentan "soluciones propias pensadas desde Galicia, pero mirando lo que pasa en el mundo. "Somos capaces de cambios transformadores", dijo Pontón, quien añadió que "es clave una Galicia gobernada desde Galicia".

En nombre de los representantes locales, la alcaldesa de Tomiño, Sandra González, manifestó que los ayuntamientos nacionalistas están "esperanzados" en un "cambio" el próximo 5 de abril, para que haya un gobierno que "trate igual" a todos los ayuntamientos del país.