Casi tres semanas después de sellar el acuerdo para unir fuerzas en una coalición para las autonómicas y cuando el posible aplazamiento de los comicios por la crisis del coronavirus está sobre la mesa, Podemos Galicia, Anova y Esquerda Unida presentaron ayer su candidatura para las elecciones gallegas, a las que acuden reivindicándose como la "garantía" de que no habrá "fugas" en el electorado progresista de cara a lograr una mayoría alternativa al PP y así construir un gobierno "progresista y colaborativo" en la Xunta.
El candidato de En Común a la presidencia de la Xunta, Antón Gómez-Reino; la cabeza de lista por Pontevedra, Eva Solla (EU), y el número tres por A Coruña, Martiño Noriega (Anova), participaron en un desayuno informativo que ha supuesto la primera imagen conjunta de una confluencia que se cerró in extremis el pasado 21 de febrero.
"Nunca es tarde", aseguró Gómez-Reino a preguntas de los medios durante la rueda de prensa, en la que destacó que "lo fundamental" era "estar a la altura de la responsabilidad histórica en un momento en el que Galicia está muy cerca del cambio político".
Con el "gobierno progresista" como "ejemplo de las medidas que se tienen que adoptar" en un futuro ejecutivo autonómico alternativo, Gómez-Reino ensalzó que "la foto" de ayer con las referencias de Anova, Podemos y Esquerda Unida en la candidatura "es una muy buena noticia" porque "representan buena parte del caudal político de cambio de este país".
Para el de Podemos, la unión de las tres fuerzas "fue una de las peores que tuvo Feijóo en los últimos tiempos", lo que le llevó a sentenciar que "el tiempo" del líder del PPdeG al frente de la Xunta "terminó".
Uno de estos los "alcaldes del cambio" fue Martiño Noriega, para quien la coalición "atiende a una demanda de la ciudadanía" y "continúa el relato" construido desde el año 2012 por la "izquierda alternativa". Con "la diversidad" como un elemento de "fuerza" al unir "el soberanismo, el federalismo y el municipalismo", Noriega cree que Galicia En Común sella las "fugas" que podrían producirse entre el electorado progresista. "Si va a haber cambio político, será con este espacio", apostilló.
Por su parte, Eva Solla apeló a "recoger" el trabajo realizado en los últimos ocho años en el Parlamento de Galicia en materia de "defensa" de los servicios públicos, de los sectores productivos o de la cultura.
