No habrá una selectividad única para toda España, pero sí se unificarán en 2021 los criterios de corrección de las pruebas para que el resultado de estos exámenes sea "más equitativo". Así se lo trasladó ayer la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celáa, a la conselleira gallega del ramo, Carmen Pomar. La responsable del Ministerio argumentó que no se puede establecer un examen único en todo el territorio porque hay que "respetar el reparto competencial de las comunidades".

La Xunta siempre ha defendido una selectividad "equitativa" en todo el territorio. No demanda una prueba única, pero sí un equilibrio en el grado de dificultad y que se unifique la exigencia de estas pruebas entre las distintas autonomías. El nivel de estos exámenes de acceso a la universidad en Galicia es más alto que en otras comunidades y, por esta razón, los estudiantes gallegos están entre los que obtienen las peores notas de España, a pesar de los buenos resultados que obtienen en las pruebas PISA. Esto les perjudica puesto que a la hora de acceder a la universidad se pueden quedar sin plaza por el aterrizaje de alumnos de otras comunidades con mejores notas.

Carmen Pomar insistió ayer ante Celáa sobre la necesidad de introducir cambios para que no se produzcan "agravios comparativos" entre comunidades.

Aunque no habrá una prueba única, el Gobierno sí busca una mayor equidad en la corrección de los exámenes. Según explicó Celáa, no da tiempo a introducir cambios de cara a los exámenes de la Evaluación para el Acceso a la Universidad (EVAU) del próximo mes de junio. "Los estudiantes están preparando las pruebas sobre las líneas que hemos venido teniendo hasta el momento y no podemos cambiarles el mecanismo", aseguró la ministra. Sin embargo, asegura que las mejoras estarán listas para la selectividad de 2021. "El próximo curso habrá unas técnicas para la corrección y para las magnitudes de temas que estarán más alineadas entre todas las comunidades", explicó.

La ministra explicó que trabajan "desde hace algún tiempo" tanto con la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) como con el Ministerio de Universidades para buscar fórmulas "que eviten esas diferencias" en la selectividad, aunque reconoció que la interinidad del Gobierno hasta el pasado mes de enero les ha impedido avanzar "más allá de trabajos preliminares".

La conselleira de Educación admitió algunos "puntos de desacuerdo" con Celáa, pero destacó que el encuentro fue "cordial" y coinciden en que "uno de los pilares básicos de cualquier sociedad es la sensibilidad por el mundo educativo".

En el encuentro, según Pomar, la ministra valoró los resultados educativos de Galicia tanto los reflejados en el ultimo informe PISA como los relacionados con el abandono educativo, que se situó en 2019 en el 12,6 por ciento, la mitad que hace una década.

Tal y como anunció el Ministerio de Educación, se implantará un nuevo modelo de acceso a la profesión docente similar al MIR. Este tema también estuvo sobre la mesa en el encuentro entre la ministra y la conselleira. Pomar recordó que Galicia fue pionera en todo el Estado en la creación de un grupo de trabajo de las Facultades de Ciencias de la Educación de las tres universidades gallegas para analizar las competencias profesionales docentes y diseñar las competencias que los estudiantes de Magisterio deberían adquirir durante la carrera.

La Consellería de Educación reclamó al Ministerio además una ordenación de las enseñanzas de Formación Profesional a nivel estatal. Pomar cree necesario actualizar el actual catálogo de ciclos de FP, que dé respuesta a la realidad socieconómica actual y que permita flexibilizar los módulos formativos y adaptarlos al tejido socioproductivo de la comunidad autónoma.

En el caso concreto de la Formación Profesional Dual, la conselleira ve urgente también que se trabaje en una regulación específica de esta modalidad de formación. "Galicia está haciendo una fuerte apuesta en este sentido que está dando muy buenos resultados tanto a nivel académico como laboral", explicó a la ministra. Pero considera que se debería establecer a nivel estatal un marco claro de participación empresarial para favorecer una mayor implicación por parte de los agentes económicos en estos programas formativos.

La conselleira reiteró a la ministra la demanda para que se transfieran a la comunidad autónoma las becas y ayudas al estudio. "Supondría una mejor y más ágil gestión administrativa de las mismas", insistió.

Por último, Pomar pidió al Gobierno una "discriminación positiva real" en las inversiones que tenga en cuenta la dispersión poblacional de Galicia. Así, la conselleira recordó que la comunidad gallega es la que tiene un mayor número de rutas de transporte escolar con un gasto que ronda los 120 millones de euros al año.