Cando un alumno entra en una facultad, muchas veces desconoce el contenido exacto del título en el que se ha matriculado, las competencias que le va facilitar a nivel profesional o qué salidas tiene y ese tipo de factores puede influir en que en España uno de cada tres universitarios abandona el grado en el que se matricula en los dos primeros cursos. Así lo argumentó la conselleira de Educación, Carmen Pomar, para defender implantar en Galicia los denominados grados abiertos, que posibilitan que un estudiante pruebe asignaturas de varias titulaciones antes de optar por una definitiva. Y la Universidade de Santiago ya ha presentado su propuesta para poner en marcha el primero.

Su Consello de Goberno ha dado luz verde a una primera propuesta de grado abierto, impulsado por la Escola Politécnica Superior de Enxeñaría y la Facultade de Ciencias, ambas del campus de Lugo. Uniría cinco grados en la rama de Ingeniería y Arquitectura y permitiría "un sistema de educación superior más amplio y competitivo que favorezca la atracción de estudiantes" de fuera de Galicia. El estudiante, informa la USC, podría cursar 90 créditos con el reconocimiento mínimo de 60 en el grado que elija al final. Empezaría como experiencia piloto con 10 plazas, de modo que pudiese constituirse un grupo propio de docencia "interactiva", señala en una nota.